El tapiz flamenco del Ayuntamiento de León, en gravísimo estado
Cuando accedí a la planta sexta del Ayuntamiento de León en la Avenida de Ordoño II me vino a la cabeza el tan temido recuerdo: primero los franceses, luego el alto clero y ahora unos políticos ignorantes supinos, nos están dejando a León sin patrimonio. Mi interés era contemplar la pieza flamenca titulada La Clemencia de Escipión que figura en el apartado 7, titulado de varios, en el inventario municipal de nuestra capital, esta obra es totalmente desconocida entre la ciudadanía leonesa. Con motivo del incendio de este edificio en el año 2012 el periodista Emilio Gancedo realizó una artículo cuyo principal informante era el Dr Valderas, archivero de la Universidad de León, político local y regional, lamentando que podrían haber desaparecido si el incendio se hubiese propagado por esta zona. En la ciudad de León los tapices históricos de gran valor están en el Hostal de San Marcos BIC, gracias a la labor del Dr. Arquitecto don Fernando Moreno Barberá, que consiguió de distintas familias nobles de Madrid obtener una espléndida colección de tapices que han regresado a nuestro querido y ultrajado Real Convento de San Marcos, destacando al repostero de armas del Conde Duque de Olivares investigado en la Universidad de Lovaina por los doctores, Asselberghs, Guy del Marcel y García Calvo. El autor de este tapiz es Francisco Tons un tapicero bruxelense en España, concretamente en Pastrana de la mano del Príncipe de Eboli. Otro tapiz dedicado a San Juan en la Isla de Patmos está pésimamente colocado a la mano de que quienes entran a la cafetería del Hostal —personalmente he visto como algunos con incontinencia digital lo palpan—. La dirección de Paradores debe cambiarlo de sitio y sancionar a los cocodecoradores por tan mala ubicación, no se puede hurgar en los escudetes de Brabante–Bruselas de esta joya retornada del desfalco de San Marcos. Ni en la S.I. Catedral de León, ni en la Real Basílica Colegiata de San Isidoro, donde fue abad Juan Rodríguez de Fonseca, impulsor del descubrimiento de Magallanes y buen coleccionista de tapices flamencos hoy en la Catedral de Zamora, existe un solo tapiz.
Si Escipión resucitase correría a gorrazos a toda la catrapea de concejales de Cultura desde el año de la compra por don Mario Amilivia hasta la actualidad postpandémica, por el desdén y maltrato otorgado a un tapiz de estilo flamenco
Tenemos que ir al edificio del Ayuntamiento en Ordoño, adquirido por el alcalde Amilivia en 1996 a Caja España —ignoro si Unicaja tiene alguna reserva de propiedad en esta zona noble pues en la conocida como «Sala de Prense» se encuentra este tapiz denominado La Clemencia de Escipión—. Si Escipión resucitase correría a gorrazos a toda la catrapea de concejales de Cultura desde el año de la compra por don Mario hasta la actualidad postpandémica, por el desdén y maltrato otorgado a un tapiz de estilo flamenco. Esta obra fue adquirida por la Caja Postal de Ahorros y pasó desde el Patrimonio Nacional con el número 439, las dimensiones son de 4,13 x 6,22 metros, ubicándose en la llamada zona noble del edificio de Ordoño II cuando la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de León tenía como presidente al prócer leonés don Emilio Hurtado Llamas, aunque la entidad referenciada en el tapiz es la Caja Postal. En la mencionada sala de prensa, este tapiz ha sido ¡¡¡pisoteado!!!, ensuciado y escarnecido por la petulancia de sacar una foto con el tapiz de fondo. Rogaría que todos los medios gráficos de nuestra ciudad tomen nota de cómo se encuentra la parte doblada en el suelo, siento vergüenza como leonés y contribuyente. En noviembre del 2019 retornaba el último tapiz de la colección flamenca que posee la Universidad de Salamanca, magníficamente restaurado en la Real Fábrica bajo el mecenazgo de la Fundación Gruposa. El desmontaje de estas piezas es complicado y en el caso del de León más, la forma de embalarlo y trasladarlo a Madrid requiere técnicos especializados, la limpieza, alineación consolidación y reintegración precisa manos de buenos especialistas, el forrado y posterior montaje expositivo ha de tener una atención especial, es necesario un espacio superior a los 35 metros cuadrados en vertical. El Ayuntamiento de León tendrá que seleccionar en alguna de sus dependencias expositiva para el nuevo espacio visual del tapiz de Escipión. Les sugiero a los ediles de San Marcelo que se lean los pliegos de prescripciones de la Universidad de Salamanca, analicen el importe del contrato de restauración y el tiempo estimado. León necesita defender su patrimonio conservarlo para disfrutarlo a la población actual, al turismo y a las generaciones posteriores. Para finalizar quiero agradecer la atención dispensada por el edil Canuria y su secretaria.