El CIS reparte esperanzas

Para distribuir equitativamente la ufanía, el último macrosondeo del CIS advierte al PP de que el PSOE se le está acercando en estimación de voto, aunque la distancia a favor de los "populares" es aún de 3,9 puntos, un colchón sobre el que reposar una confianza vigilante, y al PSOE le concede una ventaja de 3,2 puntos sobre el PP en intención directa de voto, antes de la tabulación de los datos de campo. Las «cocinas» demoscópicas pueden haber maravillas para agradar al cliente, endulzando el sabor más amargo, pero la credibilidad y la solvencia científica del CIS, tanto en España como en el extranjero, es un hecho que ayer recordaba el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Jorge Fernández Díaz, para justificar cómo una intención directa de voto a favor de uno se convierte en estimación de voto a favor de otro. Ello es debido a la complejidad científica de las tareas que realizan los institutos de opinión, que interpretan mediante preguntas esquinadas a pie de campo y fórmulas matemáticas en el taller de operaciones la sinceridad que el encuestado intenta a veces disfrazar. A los socialistas les satisface notablemente su ascenso en intención directa de voto desde el pasado julio -gana el PSOE 2,6 puntos y pierde el PP 2,3-, y tanto o más el recorte de la distancia en estimación de voto respecto a los populares, de 9,7 en enero a 3,9 en el pasado octubre. Sigue existiendo una distancia, avalada por el CIS, entre los dos grandes partidos, y en las comunidades autónomas, a las que se ha extendido este macrosondeo, se repite asimismo la superioridad porcentual del PP, aunque amenazadas esas mayorías relativas por los pactos que el PSOE pueda concertar con IU o con las fuerzas locales, como ha sucedido en Aragón y Baleares, y podría volver a suceder. Tiene, sin embargo, el PP la satisfacción de ver notablemente aumentada su estimación electoral en Castilla/La Mancha, feudo tradicional del socialista Bono, aunque la presumible alianza allí del PSOE con IU podría mantener a los populares una legislatura más en la oposición. Y en la comunidad de Madrid no alcanza el PP la mayoría absoluta que venía obteniendo y disfrutando Ruiz-Gallardón, pues el CIS sólo concede a la lista que encabezará Esperanza Aguirre un 47,7% de los votos. Un Gobierno coaligado PSOE/IU se haría posible en ese caso, como sería igualmente de prever meses más tarde en Cataluña, donde entre el PSC e IU obtendrían cinco puntos más que CiU. El último sondeo del CIS avivaba ayer aún más la campaña electoral, distribuyendo ufanías equitativamente entre los adversarios políticos, en defensa unos y al ataque otros de la torre del poder.