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Hay un tráfico exagerado. Continuos atascos y una falta de voluntad de arreglar la situación, más que notable. O no nos damos cuenta o no nos queremos dar cuenta. No hay otra alternativa. Estamos inmersos en un laberinto donde no hemos entrado voluntariamente pero que las labores llevadas a cabo por nuestro Gobierno, impiden, literalmente, salir de este absoluto galimatías.

Dicen las crónicas que, por fin, después de ocho meses sin hablar entre ellos el señor Pablo Casado le ha llamado por teléfono. ¿Se ha puesto? Casi un milagro. El Sr. Casado quiere que el presidente baje al ruedo, tire de muleta y de ¿arte? Y sea capaz de ganar la batalla al animal con el que debe enfrentarse.

Ese animal es, la forma de llevar las relaciones exteriores de nuestro país, la dejación del gobierno con los bancos que se olvidan de los mayores en cuanto a las novísimas técnicas para que un cliente esté al día con su banco y con su dinero, el trato con la Casa Real y concretamente con su comportamiento, el del presidente con S.M. el Rey, la tardanza en encontrar el camino para tomar decisiones y poder tener un CGPJ en orden y que esté compuesto de una vez por todas. Se nos cae la cara de vergüenza cuando temas tan importantes nunca ven la solución, la ley de educación que llega tarde, mal y nunca, la reforma laboral, pretexto ideal para tener un día si y otro también a la ministra y vice segunda Yolanda Diaz en los medios, sobre todo los afines, la situación del campo y sus trabajadores que se desgañitan para pedir, sencillamente lo justo pero que no van a conseguir, desgraciadamente, y muy recientemente el tema de Ucrania y la participación española en ese «evento».

Son algunos ejemplos de los «marrones» en los que tiene que ponerse a trabajar el Gobierno, compartiendo la colaboración de los profesionales de cada uno de esos temas pero que simplemente este gobierno no los acepta. Vamos, que no acepta sus opiniones (las de la oposición, con especial atención, como debe ser, al PP) Sin embargo, conceder prebendas a los socios que le mantienen en la Moncloa eso sí, a eso sí se apunta por lo que le interesa. Por cierto, qué mal visten eso socios del Gobierno que le están últimamente incordiando. ¿No se puede hacer algo con eso?

Mientras tanto, mientras todo esto ocurre, nos preguntamos ¿qué hace la ciudadanía? ¿Tenemos mérito al estar callados o tenemos una enorme pereza en decir esta boca es mía?

Mientras tanto, mientras todo esto ocurre, nos preguntamos ¿qué hace la ciudadanía? ¿Tenemos mérito al estar callados o tenemos una enorme pereza en decir esta boca es mía? Somos muy espabilados para saber lo que hay que hacer, cuando lo comentamos en el bar con los amigos y no nos atrevemos a decir una palabra más alta que otra cuando de verdad hay que decirla. Dudo si eso se llama cobardía, timidez, desconocimiento o ande yo caliente y que se ría la gente.

Lo muy grave es que de esta situación del ciudadano y su actitud de callarse, quien se está verdaderamente aprovechando es quien es más osado, más mentiroso, mas chillón y más embaucador. Perdón, no se por qué se me viene precisamente ahora, la imagen del gran Tezanos y su sofisticada tecnología y preparación para hacer y llevar a cabo la interpretación de las encuestas de tal manera. ¡Menudo genio el tío! Pero ni «mu» en la acera de enfrente. Creo que ya ni siquiera se le considera pero debemos aceptar que hay mucha gente que, al igual que pasa con la tecnología de los bancos, no son capaces de distinguir la verdadera intención de Tezanos y pueden aceptar sus argumentos. Increíble pero cierto.

A esta inquietante situación ha llegado España porqué se ha dejado llevar por los argumentos fáciles que puestos en boca de esta gente del gobierno están haciendo tanto daño.

Impresentable que este Presidente adopte la situación, pongo por caso, de no dar información de los viajes en Falcon y las razones verdaderas de esos viajes. El dice que son Secreto de Estado y todo el mundo a callar. ¿Es eso, de verdad, democracia? No me haga usted reír que se me parte el labio.

Pues ese argumento ha sido exhibido por activa y por pasiva y esa gente que, en los bares, tienen soluciones para todo, pues una vez más se callan y no protestan.

Y la participación de España en el episodio de Ucrania, no nos hace mucha gracia. Resulta que es más importante, estar contándonos las cualidades de nuestro buque Blas de Lezo, que explicar con más detenimiento qué van a hacer en Ucrania los militares españoles. Eso es importante. Saber como en nuestro buque, mucho menos. Y así nos va.

El presidente Biden, tiene una video conferencia con los presidentes de los países europeos, precisamente para hablar sobre decisiones a tomar con el tema Croacia.

¿Estaba en esa reunión España, el presidente Sánchez? No nos equivoquemos. Los tontos somos nosotros. Ellos, la vídeo conferencia no lo son. Ellos practican unas relaciones exteriores, internacionales, que, generalmente son ejemplo de hacer bien las cosas. Nosotros....

¿Cuando, de verdad, va a poder España merecer esa importancia y esa personalidad que a todos nos gustaría, que nos permitiera participar en reuniones porque nuestras opiniones fueran requeridas? Ni se sabe

No nos engañemos, este, como tantos otros problemas que vive nuestra nación se tienen y se deben arreglar desde dentro. Nadie va a venir a ponernos una alfombra para que caminemos con mayor comodidad. O la ganamos nosotros, o nada de nada.

Rematemos estos comentarios con el tema de la inflación. ¿También son los ciudadanos los responsables de que tengamos que sufrir un descalabro en cuando al poder adquisitivo para llevar una vida digna? Pues algo dirán desde las alturas para que la razón esté siempre de la otra parte. Mi postura es clara, no tenemos ningún mérito y sí tenemos mucha pereza.

Solo un comentario más. Las malas soluciones dadas en estos episodios suelen actuar como un boomerang. Se les vuelve contra ellos. El tiempo dirá...