El Gobierno socialista: ninguneo a las infraestructuras ferroviarias leonesas
Cuando la ministra de Transportes vuelve a la Variante de Pajares nos viene a la memoria el año 2004 cuando, siendo ministro de Fomento Francisco Álvarez Cascos, se puso la primera dovela en La Pola de Gordón. Tras décadas de intentos, el Gobierno del Partido Popular logró planificar, financiar y ejecutar el proyecto ferroviario más complejo de España. 18 años después la ministra Sánchez viene a la variante de visita sin que aún el ferrocarril pueda circular e igualmente sin dar solución ni respuesta a las múltiples necesidades que afectan a nuestra red ferroviaria. Una visita más de propaganda.
Otro ejemplo, San Andrés del Rabanedo, atravesado por la línea férrea hacia Asturias donde el Gobierno socialista solo plantea promesas o dar soluciones del siglo pasado. Otro ejemplo, el abandono del puerto histórico de Pajares sin inversiones ni plan para su salvación, mientras empresas españolas de material ferroviario, referentes en todo el mundo, muestran su interés para convertirlo en un espacio tecnológico que sería pionero en toda Europa.
El suma y sigue del abandono socialista a nuestras infraestructuras ferroviarias es infinito. El Gobierno del Partido Popular logró en 2018 que el Corredor Atlántico se extendiera al noroeste de España, recordando que fue el Gobierno socialista el que excluyó años antes a Galicia, Asturias y león del referido corredor. Y ahora, con otro gobierno socialista, un nuevo ataque a nuestros territorios: quedan excluidos de las autopistas ferroviarias, que van a jugar un papel fundamental en el desarrollo económico y la competitivo de nuestras empresas, impidiendo así mismo a los puertos del Cantábrico y del Atlántico que desarrollen todo su potencial. Con esta nueva decisión política nos vamos al vagón de cola en relación al resto de España y de Europa en cuando a infraestructuras ferroviarias se refiere.
Y si del transporte ferroviario de mercancías el Gobierno nos devuelve al siglo XX, en el ámbito del transporte de viajeros sus decisiones nos impiden coger el tren del siglo XXI: supresión de frecuencias, de trenes, de servicios… ¿Por qué?
El PSOE también deja fuera la relación directa entre León y Madrid de la Obligación de Servicio Público (OSP), mientras lo logran todas las capitales de la Comunidad con AVE. De los 30 trenes Avant-OSP que salen o llegan a Valladolid, ninguno se prolongará hacia León. Además el Gobierno socialista bloquea la posibilidad de que un segundo operador ferroviario llegue a León y Asturias; mientras todas las líneas AVE de España tendrán competencia, más servicios y billetes más baratos, el eje Madrid-LeónAsturias seguirá siendo monopolio de Renfe con tarifas caras y pocas frecuencias.
Renfe también ha decidido tirar la toalla con las OSP de los servicios regionales o media distancia de la red convencional. Lo más grave es que el Ministerio de Transportes también, ya que la nueva Ley de Movilidad en vez de plantearse recuperar el ferrocarril en este formato y abrirlo a la iniciativa privada como requiere Europa para 2023, lo que hace es eliminarlo literalmente. Infraestructuras ferroviarias y estaciones de una red convencional que ya no tendrán trenes de largo recorrido, ni regionales, como ya hicieron con los trenes nocturnos. Si hablamos de la antigua Feve, hoy Red de Ancho Métrico, recordemos que en León la paralización de 2 km de vía, su normativa tranviaria y la falta de trenes, pone en jaque un tren con gran contenido social cuyo nivel de viajeros ha caído al nivel más bajo de su historia.
En resumen, Sánchez discrimina a León para favorecer a otros territorios y somete a la ruina al sector productivo mientras perdemos miles de empleos. León, que fue nudo de comunicaciones del noroeste de España, se enfrenta a una decadencia sin precedentes por culpa de esta marginación. Urge un cambio de rumbo, urge gobernar con sentido común y para todos.