¿Dónde están hoy los valores?
Los que hemos pasado por el estamento militar, esa mili obligatoria, cuando te licenciabas en la cartilla había un apartado que decía: Concepto que ha merecido a sus jefes y, entre otros, mencionaba el valor. El oficial de turno anotaba: se supone (SS).
En los tiempos actuales el valor militar no es un arraigo social. Es una virtud exclusiva de aquellos que voluntariamente han elegido desarrollar su vida en el ejército.
Pero, ¿qué es el valor o los valores? Son el respeto, la tolerancia, la bondad, la solidaridad, la amistad, la honestidad, el amor, la justicia, la libertad, entre otros. Por ejemplo, la libertad es un valor humano que poseemos todas las personas para tomar nuestras decisiones y poder expresar nuestros sentimientos y opiniones.
Mi pregunta: ¿Se han devaluado los valores? ¿Qué valores tenemos hoy? Estamos viviendo un mundo convulso. Estamos en una encrucijada e, incluso, en guerra. La tenemos ah, en la puerta. Mentes frías, inhumanas, desprovistas de sentimiento, seres que son hielo ártico. Gozan viendo morir a muchos seres inocentes. Se dice que Nerón ordenó quemar Roma, culpando a los cristianos para justificar su persecución. Desde la azotea de su palacio disfrutaba de como ardía la capital del imperio.
Hoy no arde Roma, arde la sociedad entera. Las noticias de prensa, televisión, en su mayoría, son fatales acontecimientos, desgracias, muertes, violaciones, enfrentamiento, suicidios, homicidios, peleas. Ya no se respeta nada. La vida debe ser el primer respeto y es el primero que se pierde.
¿Qué falta en la sociedad? ¿Se está provocando la violencia? ¿Se educa en la paz, en la solidaridad? Las leyes educativas, los centros de enseñanza, la familia ¿qué función tienen hoy?
Las leyes educativas han eliminado la religión y los principios laicos y los valores morales. La religión catequiza. La religión hace enfermar a los jóvenes, a los menos jóvenes, a la familia, a nuestros mayores. Las religiones, la mayoría, predican la paz, la justicia, la tranquilidad del espíritu. La religión es un freno. No me refiero a la religión cristiana, no, a todas las religiones. ¿Qué transmite el budismo? Vivir en la verdad del malestar, la verdad de la causa del malestar, la verdad del cese o extinción de la causa del malestar, y la verdad del camino que conduce a la extinción del malestar. ¿Qué transmite el sintoísmo? ¿Qué transmite el cristianismo? Nos transmite: paz, solidaridad, amistad, valores de respeto, valores de familia. Y, hoy, esto se ha alejado.
Los políticos vuelven a una nueva inquisición al revés de lo que lamentablemente fue en su día. Ahora la inquisición es ideológica. No matan físicamente. Matan el cerebro. Lo hostigan y eliminan el sentido de culpabilidad. Abominan todo sentido religioso porque quieren hacer una sociedad a su medida. Las religiones estorban porque atacan las conciencias del mal y lo mejor es no tener esa conciencia de respeto. Antes había temor. Los cristianos hablaban de pecado. Otras religiones hablan de paz, de amor, de caridad. Hoy se mata, se veja a la mujer. Desprecian la vida de los demás, asesinan. Se desprecia el honor, la dignidad. No importa nada. No hay freno. No hay mandamientos. Me rebelo contra mi padre, contra mi madre, contra mi pareja. Quebranto el honor. No respecto a la persona. Se dictan leyes que despersonalizan al ser humano. No se valora la familia. Se incentiva la interrupción de la vida. Esta sociedad política española creo que no está cuerda o puede ser que los subnormales seamos los que no pensamos as.
Hay un emblema esculpido en la piedra que recibe al visitante en el edificio de las escuelas menores de la Universidad de Salamanca, el lema de la propia universidad es: Omnium scientiarum princeps Salmantica docet: ‘Los principios de todas las ciencias se enseñan en la Universidad de Salamanca’. Hay un proverbio latino que dice: Quod natura non dat, Salmantica non praestat: ‘Lo que la naturaleza no da, Salamanca no lo otorga’. Una universidad no puede darle a nadie lo que le negó la naturaleza. De este modo, ni la inteligencia, ni la memoria, ni la capacidad de aprendizaje son cosas que una universidad pueda ofrecer a sus alumnos.
Partiendo del principio de la sabiduría, ¿qué se pretende? ¿qué se persigue? Dentro de unos meses entrará en vigor la ley trans, que alumbra la ilustre, docta y antigua cajera de un supermercado y, hoy, por gracia del traidor Sánchez, ministra de Igualdad. Lo que la naturaleza negó, el hombre lo va a cambiar. Perdonen, pero lo que la naturaleza te dio, ni la inteligencia, ni la política, ni la ciencia lo puede cambiar. Lo dicen los sabios, no lo digo yo que soy un leguleyo. ¿Qué conocimiento tiene un adolescente de 14 o 16 años para cambiar lo que la naturaleza le dio? ¿Qué capacidad tiene ese ser para decir yo nací macho, ahora quiero ser hembra o viceversa? Cuando la naturaleza le da suficientes conocimientos, libertad racional, que tome las decisiones que crea conveniente. Esa ministra de Trabajo dice que la ley trans es como la reforma laboral. Pero esta ministra ¿está bien de la azotea? Si está disconforme con su sexo, que se cambie al de enfrente y en lugar de ser ministra ser ministro y no lucir tantos modelitos. Estos de Podemos yo creo que tienen sus facultades perturbadas. ¿Qué pasa por estas mentes calenturientas? ¿Qué cerebros pensantes tenemos, que van en contra de la propia naturaleza? Esta ministra, de los modelos de Zara, confunde el culo con las témporas.
Y ¿la ley del aborto? Ah, tenemos una nueva ley para que las adolescentes expulsen de su cuerpo lo que fue placer. Lo que fue un día de pasión se convierte en agonía. Ahora me voy a expulsar lo que yo no quiero ¿Con mis 16 años soy consciente de lo que hago? Toma decisiones cuando seas racional no cuando eres una irresponsable. Ah, los padres no tienen decisión. Qué locura y contradicción. Los padres serán responsables de los despropósitos de sus hijos cuando son menores de edad. Serán culpables de sus fechorías. No intervendrán en lo que está dentro del seno de su hija adolescente.
¿Qué valor tiene la familia? Cada vez menos. Familias desestructuradas en las que los hijos vagan sin rumbo, sin educación, sin límites. Se desprecia a la familia. Un perro, un gato, un pez tienen el mismo valor que un hijo o una hija. Todos forman parte del ente familiar. ¿A dónde hemos llegado? Estamos desnaturalizando nuestra sociedad. ¿Cómo hay políticos, legisladores que se atreven a dictar leyes tan perjudiciales para la sociedad? Estamos aplicando el principio de una representante de un partido político que dijo: los hijos son de la tribu y tienen que vivir dentro de ella. Es decir, los hijos no tienen padre reconocido, ni madre que les dé la teta. Se lo puede dar cualquiera de la tribu. ¿Cómo son tan progres tendrán concubinas? ¿Cómo hay políticos de esta calaña? Yo creo que vivieron una adolescencia o juventud traumatizada, alocada y, lo que ellos padecieron o se lanzaron al libertinaje, hoy, quieren traspasarlo a una sociedad para hacerla anárquica. Que me perdonen estos políticos, pero no tienen valores, ni dignidad, ni amor, ni cariño, ni nada. Son perniciosos, malévolos, dañinos y perversos. La historia los someterá a un juicio severo y les condenará por los daños causados, pero dejarán secuelas que tardarán generaciones en curarlas. Son indignos. Lo lamentable es que el jefe de la tribu, un tal Pedro, de apellido Sánchez, lo permite. Esta sociedad la va a pudrir solo y exclusivamente por mantenerse en el poder.
Y ¿qué importancia tiene en esto la Educación? Ya se han encargado de hacer una ley permisiva. Ya se han encargado de dar más derechos a los alumnos que a los profesores. Al profesor se le ha quitado la autoridad, la dignidad. La anarquía se apodera de las aulas. Así se explica las desbandadas de adolescentes que asolan los barrios, las ciudades, que delinquen, que matan, que se rebelan contra el orden. Todo esto ¿por qué? Porque los gobiernos quieren esa sociedad en anarquía, en tiranía, en deserción continua. Es un caldo para sus pretensiones. Este Gobierno será juzgado por su tiranía social. Pretende comprar a todos los desarrapados para seguir en el poder. Este Gobierno, será responsable de llevar este país a la ruina social.
No hay ningún programa que eduque en valores. Solo hay programas para convencer a la sociedad de que ellos son los que van a sacar este país adelante. No. Gobierno de Pedro Sánchez, tu eres y serás el responsable de que en la sociedad no se apoye a la familia. No se apoye al docente. No se respete al sanitario. Es lamentable que al igual que Nerón este Gobierno acuse a los demás de quemar España cuando quien encendió el fósforo fueron los ministros y ministras y, quien aviva la llama, es el jefe de la banda.