Siglo XXI, abolicionismo ya, «¡Mujeres! Juntas por nuestros derechos»
Hoy 8 de marzo de 2023, denunciamos que los derechos de las mujeres se ven amenazados en España tras siglos de lucha por nosotras y por todas nuestras compañeras; las de ayer, las de hoy y las de mañana. Pero es cierto que la sociedad nos impone estar continuamente alerta porque en cualquier momento los avances conquistados se pueden perder, y esto es lo que está ocurriendo en este año 2023.
Las demandas feministas están siendo sustituidas por políticas neoliberales con intereses patriarcales y económicos que colisionan con los ejes troncales del feminismo y los derechos de las mujeres que no son otra cosa que la defensa de los derechos colectivos.
Como mujeres feministas convocamos una manifestación para visibilizar nuestra independencia, porque el movimiento feminista dice ¡basta ya! a las injerencias interesadas, ¡basta ya! a la usurpación con la etiqueta de feminismo para hacer y trasladar una agenda contraria a la agenda feminista.
Denunciamos las leyes que borran a las mujeres (Ley trans recientemente aprobada y en vigor), el incumplimiento de la promesa de avanzar en la abolición de la prostitución, de erradicar y deslegitimar la explotación reproductiva y las consecuencias penales de la ley del ‘solo sí es sí’ que aunque consideramos que contiene avances muy positivos ha derivado en la excarcelación de delincuentes sexuales.
Hay motivos contundentes para convocar una manifestación independiente ya que nuestras reivindicaciones no pueden ser invisibilizadas a favor de falsas unidades.
Este 8 de marzo como siempre ha hecho el movimiento feminista de León, reivindicamos la agenda feminista. Es decir, la abolición del género opresor, el fin de las violencias machistas y de la explotación sexual y reproductiva, la igualdad de derechos entre hombres y mujeres en todos los órdenes (civil, laboral, económico, político, social, familiar…) y por una historia y un lenguaje que nos visibilice. Esta agenda no puede ser censurada ni cancelada, por eso hay en León y en muchas otras ciudades de España dos manifestaciones ya que no vamos a permitir que se silencien nuestras reivindicaciones que denuncian todas las injusticias patriarcales.
El feminismo quiere abolir los géneros, la ley trans reconocerlos como identidad y defenderlos como categoría legitima. Esta ley permite que con la autodeclaración sea suficiente para el cambio registral de sexo, sin presentar ningún documento que acrediten su condición, sin la necesidad de ningún cambio físico ni tan siquiera el nombre.
Esta ley impacta negativamente en la fiabilidad estadística (violencia, salud, empleo…). También puede afectar a las cuotas paritarias de representación, a los espacios seguros de las mujeres (vestuarios, cárceles, casas de acogida,..) en el deporte femenino….
La abolición de la prostitución es un deber público, no solo por lo que tiene de violencia simbólica contra todas las mujeres y material contra las que están en situación de prostitución, sino por que ataca a la dignidad de las mujeres y de los derechos humanos. Emplazamos a este gobierno, autoproclamado más progresista y mas feminista de la historia de este país, a que ponga en marcha la Loaps (Propuesta de Ley Orgánica Abolicionista del Sistema Prostitucional) presentada por el movimiento feminista y que tiene guardada en una cajón desde el 2020. No se puede blanquear la prostitución denominándola trabajo sexual. No se pueden defender los privilegios del poder masculino bajo el mito de la libre elección. Perseguir la trata no es suficiente ya que sin prostitución no hay trata.
Exigimos el Derecho a la Interrupción Voluntaria del Embarazo en la sanidad pública en cada provincia, sin chantajes y coacciones emocionales hacia las mujeres. Denunciamos al gobierno ultraconservador de Castilla y León por sus propuestas políticas contra los derechos de las mujeres. Las mujeres no aceptamos que se nos tutorice como menores de edad. Este gobierno de Castilla y León no busca proteger la maternidad, lo que quiere es cercenar derechos a las mujeres y cuestionar su capacidad de decidir libre y autónomamente sobre su vida.
Creemos que otro mundo en igualdad es posible y por eso hacemos un llamamiento a todas las mujeres y hombres que consideren que otra sociedad, no patriarcal, sin violencias contra las mujeres, en igualdad de derechos, oportunidades y responsabilidades entre hombres y mujeres, una sociedad pacífica, con justicia y distribución de la riqueza, es posible.
Como dice la escritora Najat El Hachmi: «El próximo día 8 no saldremos a celebrar ninguna fiesta porque no nos empoderan ni la purpurina, ni el maquillaje, ni el hijab, ni el twerking, saldremos a reivindicar lo que es de justicia: dignidad económica, legal y social para llegar a ser simplemente personas».