Hoy, Viernes de Dolores, sale la Antigua del Camino

Dice el Eclesiastés [3,1] que «todas las cosas bajo el sol tienen un tiempo y un momento». En el caso que nos incumbe, el tiempo alcanza eco y notoriedad una vez que se anuncia la celebración de la inmemorial novena que, como es tradicional, por la paz del mundo, se celebra en honor de la Antigua del Camino en el alcázar mariano que se alza en pleno Camino de Santiago, los días previos al quinto viernes de cuaresma. Este año, además, sirve de preparación de los actos de la coronación canónica de la Sagrada Imagen, tal como anuncia el cartel correspondiente. A este asunto me referiré después.

Y el momento al que alude el versículo veterotestamentario tiene centro de gravedad y resonancia cuando llega el Viernes de Dolores, es decir hoy, en la procesión que se inicia a las ocho de la tarde, que es testimonio de la encendida devoción que ha suscitado, desde muy lejanas calendas, la ‘Morenica del Mercado’ entre la sociedad leonesa. Expresión de fe, penitencia, y profundo fervor, la multitudinaria concurrencia de fieles a este cortejo penitencial refleja un sinfín de sentires, lo mismo personales que colectivos, y, a la par, trae a la memoria tantos episodios como ha protagonizado esta Madre Amantísima del Camino en la vida de la ciudad a través de los siglos.

La documentación histórica avala la veracidad de los acontecimientos. En acción de gracias por haber recibido el beneficio de la lluvia, el tres de mayo de 1663, jueves, fiesta de la Ascensión del Señor, desde el santuario de la calle de Herreros, la Sagrada Imagen fue llevada en rogativa hasta el cercano Monasterio de las MM. Concepcionistas, a petición de los feligreses del barrio. Tres días después, antes de volver a ser entronizada en su camarín, la Virgen del Mercado recorrió en procesión el casco histórico de la ciudad. Hizo estación en el Convento de Santa María de Carbajal, en la S.I. Catedral, en el Convento de las Clarisas Descalzas y en San Isidoro. El Lcdo. Diego de Robles de Guebara era rector de la iglesia del Mercado. Al año siguiente, en el templo parroquial quedó establecida canónicamente la ‘Compañía de la Zarza’, título en clara alusión a la ‘Aparición’ de esta Reina de los Mártires, que la tradición acredita el nueve de febrero del año 560 y recogida en un fresco en la sacristía de la citada iglesia.

«La Historia no es archivo, sino resurrección», es aserto de Guillermo Díaz-Plaja. Por ello, recordaremos que la primera estación que hace la Dolorosa del Mercado cada quinto viernes de cuaresma tiene como escenario el mencionado monasterio benedictino de Santa María de Carbajal. Las otras dos se desarrollan ante la capilla neorrománica del Santo Cristo de la Victoria y en la plaza de Santo Domingo; ambas son dos actos expresivos provenientes de la piedad popular. Como se sabe, la Corporación Municipal puja a la Antigua del Camino en nombre y representación del pueblo de León, así como las autoridades asistentes a la procesión, desde el inicio de la calle Ancha hasta la mencionada capilla del Cristo de la Victoria. Nuestro actual prelado, P. Luis Ángel de las Heras Berzal, CMF, ha sido el primer obispo de León que ha pujado un ‘paso’, haciéndolo por primera vez, precisamente, pujando a la Virgen del Mercado en el trayecto mencionado.

La visita anual de la Virgen a las monjas benedictinas tiene su origen en un episodio acontecido el 12 de marzo de 1853, hace, pues, ciento setenta años. Refiérese que dicho día se derrumbó gran parte de la iglesia parroquial. Y esta «Sacratísima Virgen de los Dolores», como la citan numerosos documentos del archivo parroquial, hubo de ser trasladada al antedicho cenobio. Allí se mantuvo la imagen y los cultos litúrgicos durante tres años. Restaurado el templo parroquial, de conformidad con los planos firmados por el P. Echano, religioso benedictino del Convento de Sahagún, el tres de marzo de 1856 regresó a su camarín de la calle de Herreros. El coste de la obra fue de ochenta y seis mil reales.

A tal efecto, aquel lunes de cuaresma, «día de santo júbilo para los leoneses», a las tres y media de la tarde, se organizó una solemne procesión que partió del convento de las Carbajalas; transcurrió por las cuestas de Carbajal y Castañón, calle de Santa Cruz, plaza Mayor, calle Nueva (hoy Mariano D. Berrueta), plaza de Regla, calle Ancha y calle de la Rúa, haciendo estación, antes de entrar en el templo parroquial, en el Monasterio de las MM. Concepcionistas donde jóvenes y niñas de la parroquia ofrecieron a la Sagrada Imagen dos ramos de cera. Francisco Fernández Rodríguez era entonces párroco de Nuestra Señora del Mercado. Murió el cinco de enero de 1880, siendo Penitenciario de la S.I. Catedral de León.

Unos meses antes, el cinco de agosto de 1855, a causa del cólera, desde el convento de Carbajal, la veneranda imagen fue llevada en rogativa por última vez a la S.I. Catedral de León, donde ocupó como siempre el altar mayor. Al igual que en ocasiones anteriores, todos los gastos inherentes a este traslado fueron sufragados por el Ayuntamiento de León y el Cabildo catedralicio.

El pasado nueve de febrero, festividad de la ‘Aparición’ de Nuestra Señora del Camino de los Franceses, dicho a la vieja usanza, al finalizar la Eucaristía oficiada por el ya citado obispo de la diócesis, P. Luis Ángel de las Heras Berzal, CMF, éste anunció que el próximo día siete de octubre, festividad de Nuestra Señora del Rosario, la ‘Morenica del Mercado’, Antigua del Camino, será coronada canónicamente. Esta decisión de nuestro prelado, que confirma una de las aspiraciones que subyacía en el seno del alma popular, fue recibida con suma gratitud y enorme gozo por parte de todos los fieles allí presentes.

Antes de entrar litúrgicamente en la Semana Santa, la Iglesia Católica celebra hoy la fiesta de los Siete Dolores de la Santísima Virgen. En León, desde tiempos inmemoriales, la procesión de la ‘Morenica del Mercado’, como así denominó a esta sagrada imagen Máximo Cayón Waldaliso, cronista oficial de la ciudad, esto es, de la Antigua del Camino, es la procesión del pueblo de León. Y el pórtico inmemorial de la Semana Mayor legionense. La cita es hoy, como dije antes, a las ocho de la tarde, en la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Mercado, templo declarado B.I.C, —pronto hará media centuria—, el 28 de septiembre de 1973, emplazado en pleno Camino Francés.