Minerva se enerva
Ahora que ha pasado la Semana Santa de León, podemos analizar y plasmar sobre el papel lo que los «hermanos» de las distintas cofradías y los vecinos de la ciudad de León han observado en las procesiones de la capital.
Es admirable el esfuerzo de miles de personas que participan y organizan nuestros actos, pero quiero centrarme en una cofradía de las más antiguas y de la que formo parte desde niño, la Real Cofradía Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Vera Cruz. Esta cofradía organiza en los años impares la procesión oficial del Ayuntamiento de León, la Procesión del Entierro del Viernes Santo por la tarde, y cierto es, que se necesita un gran número de hermanos y una buena organización para sacarla adelante, con todo lo que conlleva la preparación de los pasos, las flores, etc..., y como pasa en todas las organizaciones, hay quién que se piensa que está por encima del bien y del mal, algo cuanto menos gracioso tratándose de una cofradía.
Hemos visto cómo el pasado Viernes Santo, el Cristo del Desenclavo, sin saber por qué y sin que la Junta de Seises de la cofradía diera explicaciones a los hermanos que llevan a hombros a la talla más antigua fechada en el siglo XVI, salió sin banda de música, algo no es algo habitual en nuestra Semana Santa leonesa. Y no solo eso, como todos ustedes saben, la mayoría de los pasos llevan escolta. pero en esta ocasión al Cristo del Desenclavo se le quitó la escolta sin previo aviso, siendo escolta de honor perpetua la Guardia Civil.
Hay que recordar también que hace unos años se quedó sin salir a procesionar la Virgen de la Amargura por falta de braceros. Braceros escasean en muchas de nuestras cofradías y, aún así, Minerva todavía se niega admitir a las mujeres como hermanas con derecho a ponerse la túnica, no sé qué pensaría de esto el Ministerio de Igualdad si se entera.
Braceros escasean en muchas de nuestras cofradías y, aún así, Minerva todavía se niega admitir a las mujeres
El culmen de esta Semana Santa 2023 se ha producido cuando el abad de la cofradía manda un comunicado de agradecimiento a todos los Hermanos especificando que «esta cofradía se crece ante las adversidades», unas palabras que han indignado a los 1.870 Hermanos que la componen.
Hay que decir alto y claro que esas adversidades han sido únicamente fruto de su ineptitud y falta de organización. Se podría hablar también del sentir de los miembros del Dulce Nombre de Jesús y de Angustias y Soledad, que parece que las relaciones no son las mejores gracias a este abad.
Desde estas líneas es necesario apuntar que la Semana Santa de León y Minerva están por encimas de las personas, por eso contamos con una Fiesta de Interés Turístico Internacional que, de continuar con comportamientos como los del abad de nuestra cofradía, dicho reconocimiento podría peligrar. Nuestra Semana Santa fervorosa que hace más grande si cabe a León y que exhibe estos días imágenes de los más amados escultores. Nuestro patrimonio artístico, nuestra tradición, la meticulosa conservación de cada detalle, todo nuestro esfuerzo al que se suma el esfuerzo del sector turístico es lo que ha conseguido mantener la promoción internacional de la festividad durante más de veinte años.
Hoy es un buen día para recordar que la Semana Santa y las procesiones salen adelante por los hermanos que tienen devoción. En el caso del Viernes Santo y la procesión de Minerva, el Santo Cristo del Desenclavo procesionó sin banda de música pero procesionó, y lo hizo gracias a sus 84 hermanos y a su seise que portaron el paso y a los tambores de La Soledad que marcaron el riguroso y solemne paso, en silencio, de tal manera que los ciudadanos pudieron entregarse a El Señor por las calles de León.