El alcalde se ríe de los leoneses, decía Diez
Desde la oposición todo parece más fácil. Al menos para José Antonio Diez. En 2017 la postura del actual alcalde sobre la llegada del tren de Feve al centro de la ciudad, que ya acumulaba retrasos y dudas, era contundente: mostraba entonces su alarma ante el incumplimiento de los plazos y lo que consideraba señales preocupantes de que el tren iba a quedar varado en La Asunción. «El PP no tiene solución para la integración», denunció; y llamaba la atención sobre la situación de la línea, que con el PP en el Ayuntamiento y el Gobierno central seguía perdiendo usuarios y rentabilidad.
Siete años después, con una ya larga gestión de Diez como alcalde y del PSOE al frente del Ejecutivo central, lo que intenta perpetrar el regidor de la mano del ministro vallisoletano de Transportes Óscar Puente es la consolidación de la afrenta para la provincia, conformándose con un corredor verde en los últimos dos kilómetros que condenan la comunicación de cercanías.
PP y UPL fuerzan ahora, a través de una moción, que Diez exija al Consejo de Ministros la normativa para que el tren regrese al centro de la ciudad y la compra de los nuevos vehículos, como se ha hecho ya en Asturias y Cantabria. «El alcalde se ríe de los leoneses», decía Diez de Silván. ¿Cómo definir lo que intenta hacer él ahora?