El día que me desilusionó Monteleón

A modo de entradilla: siempre esperando que la presencia de los personajes de la Junta en Monteleón llegara a ser flor de un día, ¡vana ilusión!, pues, cada vez, su intromisión es más dominante y colonialista, incluso en actos netamente leoneses… Mi distancia física de Legio, bastante más que ocasional, no me permite otra cosa que leer, en este medio por ejemplo, escuchar e intuir…, lo que se puede interpretar entre líneas. Del caso que hoy me motiva he observado fotografías donde aparecen algunos políticos y otros no tanto, buscando la pose para refulgir, en claro intento de hacerse pasar, aquéllos, por gerifaltes autonómicos, sin pudor de que sea un ente centralista y dominador, acaparando todos los tics, necesarios para encajar en lo colonialista. Y de ellos, siempre dispuestos a colaborar, intento comprender lo que se trasluce de las componendas coreográfica o montajes para la «galería». Sus rostros, jamás opacos, son expresión de una realidad, y nada fiables sus acartonadas sonrisas. Resulta que, ya en el epígrafe, he indicado de qué va «hoy» la observación de «ayer». Mas, es hora de decir, con toda prudencia y esmerado rigor, que estoy ante una componenda, un reportaje fotográfico: II Encuentro MonteLeón y entrega de premios de la entidad. Y no por la Fundación en sí, MonteLeón, guardiana y promotora de lo leonés, así como en lo cultural y artístico, incluso más allá de nuestros lares, que ha venido gozando de todos mis respetos. Añadiré que aprecio su funcionamiento y pervivencia, dado que no se lo han puesto nada fácil según mis indagaciones, de modo especial desde el ente autonómico, el que estaba en primera línea a la hora de malconducir a Caja España.

Ni es un panegírico lo anterior, ni una acusación lo que sigue, si bien me temo que el respeto antecitado, hoy, sus dirigentes, lo han puesto en dudoso equilibrio en mí, por dos sorprendentes datos. Es el primero la invitación cursada al señor Pollán, de Vox, ejerciente de presidente de las Cortes autonómicas, ¡todavía! Y en espera de ¡no sé qué! Ostenta por lo tanto un puesto alto (alto puesto, es enjundioso) desde el que está lejos de querer ayudarnos a los leoneses. Siguiendo sin dudas directrices de su partido. Tampoco en lo reivindicativo leonés, el PP, o el PSOE, nos dan la mano para salir de la situación de «hermanos pobres y ¡desatendidos!». Nuestro protagonista político hoy, en plan colaboracionista, sólo contempla el amarre autonómico. De la desmembración ni hablamos, ni de unos ni de otros, se les escaparía el momio. El otro personaje fotografiado es el delegado territorial de la Junta, Eduardo Diego, hay que justificar el puesto conseguido.La otra opción controvertida, para mí, viene a ser el uso del «salón de actos de Unicaja». ¡Qué trabajo cuesta decir esto último!, cuando deberíamos estar aún con la posibilidad de decir, con meridiano rigor CajaLeón, o a magnum plena Caja de Ahorros y Monte de Piedad de León. Unicaja que al parecer apostó por comprar todo, nombre y personalidad de lo leonés que era nuestra Caja de Ahorros, también reclama nuestro patrimonio en ella «depositado».Donde no puedo entrar es en las interioridades de los dirigentes de Monteleón, presididos por García Paramio, y saber por qué se propusieron invitar a los personajes citados de la Junta al acto que recordamos, cuando políticamente todos los dirigentes del ente autonómico, son partícipes del papel colonizador en general del ente autonómico. Sin olvidar a Fundos, institución autonómica con el marcado fin de controlar el patrimonio artístico y sentimental leonés, que para empezar, desplazó a MonteLeón, del que fue bastión leonés: Botines, sede y propiedad no ha mucho de nuestra Caja.Y para que todo lo escrito no se quede en simple queja, con perfecta naturalidad y agrado, «corto y pego» un breve apunte del motivo del acto de entrega de premios, a considerar entre los que otorga MonteLeón periódicamente.En esta ocasión fueron los ganadores: Manuel Moya Esobar, en el V Premio de Poesía Joven, por su Libro de visitas. Mario Blázquez Ramos, XI Premio Novela Corta logrado con Las violenias. La última y reciente creación, el I Certamen de Acuarela, resultó ganador Manuel Ángel Serantes Morán. Enhorabuena a todos, promotores y galardonados.