Carta abierta a los policías locales de Andoain León y su urbanismo Un nuevo marcador para el Amilivia
Apreciados compañeros de la Policía Local de Andoain. En primer lugar, pediros que transmitáis las más sinceras condolencias a los familiares de Joseba Pagazaurtundua; ánimo a ellos y a sus amigos. Y a vosotros agradeceros la valentía que habéis tenido, tomando una decisión que, a pesar de la trascendencia que pueda tener en los medios de comunicación, manifiesta una situación insoportable. En lo sucesivo, cuando salgamos a la calle a realizar nuestro trabajo, yo al menos, recordaré en qué contexto tenéis que realizar el servicio. No sólo con el trato a los vecinos, a los conductores, sino cuando haga acto de presencia el alcalde y los concejales, colaboradores necesarios de esa dictadura en la que os encontráis. Leo en la prensa local el siguiente titular, «Los policías locales de Andoain piden al alcalde que dimita por no condenar el atentado», este gesto os honra, no pedís para vosotros, pedís por la dignidad y por la libertad. Además lo hacéis a cara descubierta, sin pasamontañas, con vuestros datos personales y los familiares en manos de los asesinos y sus socios, en una tierra donde vemos todos los días a los policías con pasamontañas, sin duda un gesto de incalculable valor para la democracia. Dicen que estáis indignados; cómo no estarlo, indignados es poco y pedís que dimita como responsable directo de la plantilla policial. Lo que hacéis no sólo es valeroso, hay que reconocerlo públicamente, es un gran servicio a la libertad. Os observo con semblante tranquilo en la foto de prensa y de forma inmediata me viene a la mente: ¿qué elucubrarán las cabezas calenturientas y malvadas que os dirigen desde ese Ayuntamiento para vengarse? Porque, que nadie lo dude, se van a vengar de vuestro gesto valiente, no lo van a perdonar y, si eso ocurre, ¿con quién podéis contar? Señor alcalde de Andoain, señor José Antonio Barandiarán, ni rectificando remediará su bajeza, no se merece mandar a esa plantilla de servidores de la libertad, no se merece que conozca sus direcciones, sus datos, los de sus mujeres, los de sus hijos, que usted decida sobre el sueldo que les va a pagar, que decida en qué condiciones van a desarrollar el trabajo, no se merece ser el representante de los vecinos de Andoain. Morir, realmente, vale la pena por muy pocas cosas, matar por ninguna. Compañeros del País Vasco, compañeros de Andoain, ánimo de todo corazón, que el saber hacer, el compromiso y la memoria de Joseba Pagazaurtundua perduren en vosotros y en los ciudadanos justos. Que ser valiente, como habéis sido vosotros, no sea tan caro, pero que ser cobarde, no les merezca la pena. Un saludo fraterno desde León, de este policía local de San Andrés que se despide con emoción. Joaquín Moreno. Antonino González González dice: «Mi mensaje es para el señor Cecilio Vallejo concejal de Urbanismo. Cuando visitamos el pasado mes de octubre, en el ayuntamiento viejo, la exposición sobre el futuro urbanístico de León todo era ideal: amplias avenidas, barrios más humanos, nueva estación de Renfe, grandes paseos, respeto de las alturas en los edificios... Eso es lo bonito, pero si bajamos a ras de tierra, vemos: construcción de barrios caóticos como La Palomera, invasión de aceras por nuevas construcciones, la obra paralizada junto a la iglesia de San Pedro, obras paralizadas junto a la iglesia de San Juan de Renueva, pavimento en mal estado -Mariano Andrés, Ordoño II- y, como colofón de todo ello, el edificio que se está construyendo en la calle San Antonio esquina a la calle Peña Blanca, subiendo a los hospitales. Yo pregunto quién aprobó su alineación, no deja acera, los balcones salen hasta la mitad de la calle; ¿ese es el futuro urbanístico de León? Y precisametne en una calle que debiera ser modélica pues nos lleva hasta los hospitales, dos peatones no se pueden cruzar sin chocarse, pues sus aceras no tienen ni medio metro de ancho. Mire, en la Escuela de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Valencia, el primer día a sus alumnos los llevan hasta la ciudad de Castellón para que vean lo que nunca debe hacerse en el plano arquitectónico y urbanístico con una ciudad. Aquí en nuestra ciudad de León se está tardando ya en hacer lo mismo con los futuros arquitectos y urbanistas de la ciudad de León, sino pasen y vean». Francisco López llama al Teléfono del lector diciendo: «Como socio y asiduo asistente a los partidos de la Cultural en el nuevo y flamante estadio municipal Antonio Amilivia quisiera expresar mis quejas, creo que muy justificadas, en dos aspectos que entiendo que son muy importantes de cara al espectador. El primero es el nefasto funcionamiento de la megafonía en el campo, pues no te enteras de las alineaciones de los equipos ni de los cambios y la otra; pero la más fundamental es el marcador, tan ridículo que no se ve y la mayoría de las veces está estropeado. Y yo me pregunto: ¿es que con los cientos de millones que ha valido el campo no se puede instalar un marcador que no haya que verlo con lupa y que esté de acuerdo con las magníficas instalaciones de este campo?. Espero que el Ayuntamiento o quien corresponda lo subsane para prestigio de la ciudad y la Cultural Leonesa».