De la PAC verde a la negra PAC
A veces me pregunto qué hago yo aquí. Esto no es sólo una frase de una memorable canción interpretada por Labordeta, sino que podría ser perfectamente una pregunta que muchos responsables políticos debieran hacerse de forma habitual. En un artículo de opinión publicado recientemente en varios medios de comunicación Encarnación Redondo, diputada del Partido Popular en el Parlamento europeo, critica la reforma de la PAC propuesta por el comisario Fischler. Quizás ella misma debiera preguntarse qué hace en el Parlamento europeo junto a otros compañeros suyos que no son capaces de frenar una política rancia, de derechas, globalizadora y perniciosa que tan sólo favorece a aquellos países del norte, que tienen rendimientos más altos respecto a los países del sur, y sobre todo a los intereses de los EE.UU. e cara a la organización común del comercio, dejando que sea el mercado quien decida qué agricultores y ganaderos pueden seguir en el sector. Cuando se reformó la Agenda 2000 con Loyola de Palacio a la cabeza del Ministerio de Agricultura, desde la UPA ya advertimos que se había abierto una vía muy preocupante para los intereses de España. Decidieron reducir las ayudas a las oleaginosas haciéndonos creer que tendríamos un programa agroambiental para el girasol que sería incluso más interesante y atractivo para los agricultores que con el sistema anteriormente establecido. De igual forma se apoyó de forma explícita por la Ministra y su corte la reducción de los precios de intervención del cereal, provocando la caída considerable de los precios de mercado en la misma línea que recoge la propuesta. Por parte de Encarnación Redondo, eurodiputada del PP por Soria, no sólo se respaldaron estas decisiones con su voto junto al de su grupo, sino que hizo una amplia campaña de información de las «bondades» de esa reforma, defendiendo con uñas y dientes el papel desempeñado por su madrina política, Loyola de Palacio. Yo mismo, en representación de UPA, tuve ocasión de coincidir en algunas mesas redondas en las que la señora Redondo nos vendía motos sin ruedas, defendiendo las garantías presupuestarias para loa agricultores a través de los programas agroambientales, como si fueran la panacea del sector agrario, precisamente cuando ella formaba parte de esta Comisión en el parlamento europeo. Programas agroambientales que terminaron siendo un fiasco, bien porque no se acompañaban con presupuesto para desarrollarlos o bien debido a las condiciones exigidas eran casi imposible de cumplir. En el artículo de Encarnación Redondo que me ha dado pie a contestar con esta opinión, la protagonista compara la reforma de la PAC con el modelo americano, no sabemos si con acento incluido o solamente con referencias al desacoplamiento y al montante económico que seguirán recibiendo especuladores, marqueses, duques y toreros por el mero hecho de tener muchas hectáreas o cabezas de ganado. En todo caso si esta PAC se reforma y pasa de ser «la PAC verde a la negra PAC» es porque ustedes lo han apoyado. ¿O acaso el presidente Aznar no dijo estar de acuerdo en la cumbre de Jefes de Estado celebrada el 24 y 25 de octubre de 2002?. Si no se acuerda, tire de hemeroteca y lo comprobará. Es más: ¿acaso no es cierto que todos los agricultores y ganaderos recibimos una carta del ministro de Agricultura el pasado mes de noviembre del 2002 en la que se garantizaban las ayudas hasta el año 2013? ¿No es verdad que el presidente de la Junta, señor Herrera, nos comunicó el pago de la ayudas PAC con otra carta fechada el 11 de noviembre de 2002 garantizando el mismo nivel de ayudas? ¿Por qué critican lo que todos ustedes han apoyado? ¿Tal vez porque están en campaña electoral? Ustedes han elegido, y no nuestro nombre, estar más cerca de los Estados Unidos que de Alemania y Francia. Ustedes son los que defienden políticas cercanas a las tesis inglesas y americanas, en contra del conjunto de Europa. No entiendo cómo les puede sorprender la propuesta del comisario Fischler cuando va en la misma línea de lo que ustedes defienden por escrito. En la Unión Europea las reformas deben ser aprobadas por los estados miembros, no sólo por el comisario de Agricultura. Por lo tanto, quiero entender que ustedes habrán trabajado, o lo están haciendo, para buscar alianzas suficientes y conseguir apoyos para ejercer el derecho a una minoría de bloqueo, e impedir así que siga adelante la reforma propuesta. Ya sabemos los agricultores y ganaderos que el Gobierno español lamentablemente no es pedigüeño y cuando en la UE se aprueban políticas favorables a los intereses españoles son logros de ustedes. Pero cuando las decisiones son contrarias a nuestros intereses los responsables son otros. ¿Por qué alguna vez no se preguntan qué hacen realmete ahí?.