Cerrar
Publicado por
MANUEL ALCÁNTARA
León

Creado:

Actualizado:

SE LLEVAN a matar, pero siguen vivos, con la finalidad de seguir presentándose a las próximas elecciones, una vez pertrechados de nuevas promesas. El espectáculo que están dando los dos más importantes partidos políticos españoles es cualquier cosa menos aburrido. Lástima que no sea gratuito, ya que sus litigios siempre acabamos pagándolos nosotros. Lo que ahora está de moda es la querella, que es el procedimiento mejor que se ha inventado para que se eternicen las discordias, hasta que falla el tribunal competente. «Y mi querella al tribunal del viento», dijo Villamediana, en un hermoso endecasílabo que remitía sus amorosos pesares al voluble juicio del aire. El PSOE se querella contra el secretario del PP en Madrid, además de pedir la suspensión de la condición de diputados de los dos últimos golfantes que han emergido en la vida política española. También se ha querellado contra dos constructores y contra el líder de Renovadores por la Base. Por su parte, el PP quiere querellarse contra Simancas, que ha insinuado de un modo clarísimo que quienes han urdido la trama son aquellos a quienes más favorece. Al cohecho, pecho, pero de momento todos lo niegan. Bien mirado, mucha más gente tiene motivos para querellarse. ¿Por qué no se querellan los socios del Barcelona contra su nuevo presidente? El joven abogado Joan Laporta barrió en las elecciones asegurando que ficharía a Beckham, pero el Real Madrid le ha birlado al Adonis del césped. Total, sólo por 35 millones de euros, cifra que se estima equivalente a la que puede percibir, tras un buen acuerdo, un diputado desertor que se cotice. También podría haberse querellado la ETA contra el teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Peñafiel, que acabó con la vida de dos ex compañeros. Hasta ahora, matar guardias civiles era una exclusiva de la banda y muy bien pueden considerarlo como una forma de intrusismo. Con tanto trabajo, los señores jueces pueden perder el juicio.

Cargando contenidos...