Muy mal talante
Cristina Alberdi, por coherencia con su discrepancia, presentó su dimisión de la dirección de la FSM, pero la cúpula socialista no se conforma: le pide el escaño y le sugiere el abandono del partido. Finalmente, la expedientó, lo que sugiere una próxima expulsión. Este rigor con una voz respetuosamente discrepante dice bien poco de la democracia interna que debe existir en el seno de las organizaciones y muestra el surgimiento de un talante autoritario en la Ejecutiva socialista. 1397124194