VUELTA DE TUERCA
Una ficción
CASI todo lo que sabemos de Arnold Schwarzenegger tiene que ver con la ficción. Conocemos su fuerza colosal, su indestructibilidad, su carencia de piedad y su éxito con las mujeres, al menos con las del celuloide. Menos se sabe sobre su formación general, sobre su experiencia política, sobre sus conocimientos y planteamientos económicos. No cabe duda de que los californianos demuestran que son gente arriesgada y audaz al votar a su próximo goberneitor . O quizá son gente práctica y no exenta del sentido del humor y han concluido en que, para contar películas, nadie mejor que una estrella de cine. O quizá todo es más sencillo todavía. En el estado de los ricos más ricos lo único importante es que nadie venga a molestar. Y Arnold es celuloide, hormona, una ficción.