En el diario de Aznar

QUERIDO diario: Que lo hemos pillado. Yo ya se lo había dicho a Chors doble uve. Que está ahí, que está ahí, déjame a la guardia civil y lo cogemos en tres días. Y él, que no, que el séptimo de caballería era suficiente. No se puede comparar. Los americanos son listos, pero dónde va a parar. Nosotros, con aquello de los maquis, lo aprendimos todo. ¡No sabemos nada nosotros, buah! Y hay que ver cómo estaba el Sadam. Miedo daba verlo. Esas barbas. Y en ese agujero, como una rata. Que miren bien en el agujero, que ahí están las armas. Ahí debe de haber, por lo menos, ochocientas bombas atómicas. Lo que pasa es que están bien apiladas y no se ven. Y debajo de la cama, gas mostaza a puntapala. Yo lo venía diciendo desde el primer día. Mirad bien ahí, mirad bien ahí. Miraron y, ¡zas!, cayó la liebre. Y lo bien que lo he hecho en Europa. De eso de la Constitución Europea. No me van a tocar las pelotas, hasta ahí podríamos llegar. Pues no viene Francia con zarandajas y garambainadas. Qué ha hecho, a ver. ¿Detener etarras? Bueno, sí, pero nada más, no vayamos a creernos. Y Silvio. Joder con Silvio. Muy amigos, muy amigos, y me viene con ésas. España, o sea, yo, tiene lo que tiene, y ni la Santísima Trinidad va a venir a liarme. Niza. Ahí está el quid. Los votos son los votos. Y si hace veinticinco años anduve en contra de la Constitución, no voy ahora a favorecer la europea. Hay que ser consecuentes. Que tengo bigote, y eso da carácter. Niza. Yo no digo que Niza no fuese provisional. Pero no me da la gana. A ver si porque Alemania tenga el doble de población que España va a ser más. ¡Si en Alemania no hay más que turcos! ¡Y excomunistas, menuda ralea! Calidad. Aquí, cristianos viejos. Que a los moros y a los judíos los echamos cuando los echamos. Y de eso no se habla. Y de eso hay que hablar. Que fuimos la reserva espiritual de Occidente. Hombre, no. Yo a Mariano ya le digo. Tú, da caña. Y a Zapatero, ni agua. Y a Llamazares, ni vino. Y a los de Ibarretxe, leña. Que Zapatero, con esos ojitos de muñeca de Famosa, lía. Pues no viene ahora con lo de estropear la Hacienda y dársela a las autonomías. ¡Menudo socialista de los cojones! Que ni a misa va, ateazo. Ha colocado a Maragall. Eso no tiene nombre. Y dice que es bueno para España. ¿Cómo va a ser bueno para España, si España soy yo y a mí me repatea? Y no es que esté con Roviretxe, que también. Lo malo es que con quién voy a pactar, bueno, Mariano, si el honorable es un sociata de mierda. Que como Mariano no saque mayoría absoluta... Bueno, nada, como la va a sacar, no hay problema. Está bien, Mariano, otro gallego mandando. A ver si dura tanto como el otro y lo hace igual de acertadamente. Los gallegos valen, y si no, ahí está don Manuel, ahí está. Patizambo y todo. Le supo andar a Franco, le supo andar al Rey, y ahí sigue. Un ejemplo a seguir. Y no Zapatero, que es de León. ¿Qué ha dado León? No sé cuántos reyes, vale, pero ¿cuándo fue eso? Cuando Maricastaña hizo la comunión. Bueno, y a Rodolfo, pero Rodolfo no cuenta, y menos ahora, que se ha pasado a la rojería telecomunicada. León es lo que es. Una provincia de por ahí a la que le confunden la matrícula con la de Lérida. Yo una vez les dije no sé qué de una escuela de pilotos. Tengo que preguntar a ver qué es lo que les dije exactamente, que a lo mejor me pasé, un calentón, cosas que pasan. Y encima tienen alcalde socialista. No tengo ni idea de quién es, pero no puede ser bueno. Mario, Mario es el alcalde propicio para ese pueblo. Pero, nada, una patada en el culo. Desagradecidos. Tú mira a ver si gana Zapatero. Y no sé por qué, si lo hemos hecho así de bien. La huelga general, zanjada. El Prestige, hundido. La guerra, ganada. Y a Ibarretxe lo vamos a meter en la cárcel, y a Atutxa. Y, además, somos la octava potencia mundial, a ver qué pasa aquí. Si Zapatero se mete en la Moncloa, de octavos nos vamos a nonagésimos en tres o cuatro semanas. Que Zapatero no tiene ni idea, joder, vamos a poner los puntos sobre las íes. No digo que cuando yo me vaya España no se note. Se notará, no porque no dé explicaciones en el Parlamento, que eso a mí no me va, sino porque España está directamente entroncada conmigo. Y si tiene que venir un salta tapias, que venga el menor, o sea, Mariano, que ya lo tengo yo bien acreditado en la libreta azul. Zapatero no tiene ni sangre. Es como un maniquí de los del Corte Inglés. Un tiparrajo. No sé qué piensa hacer, si no piensa. Un servidor sí que piensa, y no sólo hablo catalán en la intimidad, también cuento chistes. Y escribo libros. Pero libros, no ésos que escribe Felipe González. Los míos son útiles, libros libros. ¿Cuántos ha escrito Zapatero? Vamos, hombre. Bueno, Mariano tampoco. Pero es que lo de Mariano no es la literatura, sino ser un hombre de Estado, no veas lo bien que quedará en las fotos de familia, allá en Bruselas. No como yo, claro, que yo soy un caso aparte. Y bien de amigos que le dejo: Chors doble uve, Tony, y... Bueno, muchos. Él, que siga con la tarea, que si viene Zapatero, a lo mejor no tenemos ni idea de ser oposición. Estaría bueno, los españoles en la oposición. Y esas hordas, gobernando. Hordas, sí, señor. Que no hacen más que ir contra España, basta que haga yo algo para que se pongan contra España. Y esos diez millones de personas que les votan, horda pura. ¿Es que no me ven a mí, que casé a Anita en el Escorial? ¡En el Escorial, ahí es nada! ¿Y dónde casará Zapatero a sus hijos? En la iglesia de Roperuelos, que es un pueblo que no sé dónde queda, pero me hace gracia. Pues ya se sabe lo que es Zapatero. Nada. Mariano sí, que lo he hecho a mi imagen y semejanza, y eso es tener pedigrí. Y si no, acuérdate de cuando dijo aquello de los hilillos del Prestige. ¿Pues qué eran sino hilillos? Muchos, vale, pero hilillos. Y de plastilina, que era lo que decía yo. Y en cuanto a lo de la guerra, ¿qué pasa? ¿Es que no hemos cumplido con nuestras obligaciones internacionales? Por si acaso. Ahí tenemos a Francia y a Alemania. Que se pusieron en contra de mí, tú fíjate. Y ahora vienen con lo de la Constitución Europea. Si es que no tienen arreglo.