PANORAMA
El ejemplo soriano
DESPUÉS de haber vuelto, bastante sorprendido y para bien, de las jornadas sorianas sobre desarrollo sostenible he encontrado en Madrid muchas caras de incredulidad cuando he querido contarles la pretensión de aquella provincia de convertirse en sede mundial de ese Foro. ¿Cómo va a ser Soria? Me preguntan con perplejidad? Y yo me enciendo, entre otras cosas, porque soy de la lindera Guadalajara y Soria me es tan cercana en tierras, paisajes y problemas de despoblación y paisaje. Me lleno de enfado porque ese desprecio a los pequeños, a los que no han tenido quién sabe si la suerte o al final la desgracia de la industrialización a mansalva es la primera y continuada traba que la colectividad les pone como una losa sobre sus intentos de futuro. Mala cosa y cada vez menos consentida por los afectados que lógicamente se cabrean y que termina por clamar que ¡Teruel existe! Porque resulta que Soria, tan despoblada, tan a la cola en esas cifras de la macroeconomía nacional es una pionera, una auténtica bandera en las referencia de los expertos, de los empresarios, de los conservacionistas y hasta de la ONU. Tanto que ha lanzado su candidatura, sin complejo alguno y con serias posibilidades de conseguir su empeño, a ser la sede mundial del máximo organismo a configurar al respecto y dependiente de Naciones Unidas. No es broma, allí estaba entre decenas de notables el que fuera presidente de la UNESCO, Mayor Zaragoza, y allí se recibió la noticia del apoyo de Kofi Annan, actual secretario general de la ONU a la propuesta. Los que critican a Soria, o aún peor, la menosprecian , no harían nada mal en seguir esas pautas de calidad ecológica, de desarrollo armónico con la naturaleza y respeto al medio que allí están siguiendo. No es mala senda aunque por una vez es pionera la humilde pero en absoluto débil provincia soriana. De hecho ya están consiguiendo algo importante. Su nombre suena en el mundo entero.