El ciudadano Aznar

AZNAR es un particular. Un ciudadano de la calle. Ni siquiera es diputado. Incluso ha afirmado que ha dejado la política. Así que como es un particular en su partido, el PP, dicen que no tiene nada de especial que haya llamado a George W. Bush para decirle que no comparte la decisión del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero,de retirar las tropas españolas de Irak. Dice Eduardo Zaplana que su ex jefe, José María Aznar, puede llamar a quien quiera y que es amigo de Bush. Y si, claro, un particular puede llamar a quién quiera, sobre todo a sus amigos, pero claro este particular ha sido nada menos que el Jefe del Gobierno de España y su amigo, por increíble que parezca siendo como es, pues el presidente de Estados Unidos, país donde presumen de que cualquiera puede ser presidente. A la vista está. Verán, en mi opinión es bastante mezquino que el ex presidente Aznar llame a un presidente extranjero para criticar las decisiones del actual presidente de España. Me pregunto qué pretendía Aznar con su acción ¿qué Bush le siga teniendo como amigo y no se enfade con él por ser español habiendo decidido el Gobierno de España retirar las tropas? La llamada de José María Aznar es claramente desleal para con el Gobierno legítimo de España, por más que desde el Partido Popular insistan en que era una llamada particular. Un ex presidente nunca es un particular, al menos no es un particular como usted o como yo. Un ex presidente es un político más o menos retirado, pero un político al fin y al cabo. No sé, pero me parece a mi que Aznar no se ha ido y que por más que se haya instalado en la Fundación del PP, en la Faes, llevándose papeles y libros, ese será un despacho desde donde continuar haciendo política dentro y fuera de su partido. La presencia política de Aznar es evidente por más que en el PP algunos digan que don José María ya es pasado. Me temo que Aznar está presente y bien presente y que la llamada a Bush no será ni la única ni la última iniciativa política que adopte. Al tiempo.