León jacobeo

EL CAMINO de Santiago ha escuchado el habitualmente tardío pistoletazo de salida del Año Santo Jacobeo. Los peregrinos ya forman parte de nuestras sendas provinciales en un largo recorrido, el más extenso del Camino, que atraviesa de Este a Oeste la hermosa tierra leonesa. La naturaleza ha sido pródiga con nosotros, aunque a veces dudo de tal merecimiento. No siempre somos conscientes de lo que se nos regala o, al menos, descuidamos el recurso ofrecido generosamente. Y, en el siglo XXI, es rigurosamente necesario convertir el recurso existente en producto comercial; turístico en este caso. Con permiso y disculpas para los esforzados componentes de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago, éste se ha convertido, como reseñaré más adelante, en un recurso turístico de primera línea. Conviene recordar que el Consejo de Europa, hace unos diez años, proclamó el Camino de Santiago como Primer Itinerario Cultural Europeo. Y la cultura forma parte sustancial de la industria turística. No me estoy refiriendo únicamente al popular Camino Francés. Hasta otros siete, de momento, componen el entramado de rutas que convergen en Santiago de Compostela: Camino Norte, Camino Inglés, Camino Portugués, Vía de la Plata, Fisterra-Muxía, Mar de Arousa-Río Ulla y Camino Primitivo. Curiosamente, éste, (Oviedo-Santiago de Compostela) parece ser que fue el primero utilizado al comienzo del siglo IX. Hasta bien entrado el siglo X, según varios estudiosos, no se consolidó el Camino Francés y consiguientemente su importante hito: León. Hace muchos años insistí en que el peregrino no es turista. Hoy, he tenido que cambiar la afirmación, simultáneamente con la transformación de conceptos que ha sufrido el mundo del peregrino. Hacer el Camino de Santiago tiene muy diversas connotaciones en la actualidad. En unos sigue primando la espiritualidad, la fe. En otros muchos, programación itinerante con visos culturales, paisajísticos, tradicionales, deportivos, sociales, aventureros, etcétera. Por otra parte, el clásico peregrino andarín con calabaza, cayado y manteo, ha ido cediendo puestos al motorizado que, aun sin ganar la compostela (para conseguir la certificación es necesario hacer el camino andando, en bicicleta o a caballo), aprovecha la vía religiosa para hacer turismo. Y, lo que es más importante desde el punto de vista de comercialización del recurso, al cliente de agencias en viajes organizados. Este año, probablemente, sean muchos centenares los autocares que pasen por nuestra provincia camino del Santiago prometido. No todos, sin embargo, pernoctan en León, pues el calendario itinerante está elaborado por operadores y mayoristas del sector. Así pues, ése es el ámbito en que deben trabajar los responsables de la promoción de la ciudad y la provincia. Y no es difícil el recado, teniendo en consideración la oferta monumental, histórica, patrimonial y de naturaleza con la que cuenta esta tierra. Mas, dada la situación geográfica de León respecto al Camino, nuestra ciudad es un importante centro de salida de peregrinos. No todos lo inician en Saint Jean de Pie de Port-Roncesvalles, posiblemente el tramo más duro de todo el recorrido. Muchos miles, por falta de tiempo u otras razones, precisamente, comienzan la vía espiritual, deportiva, cultural, social o deportiva en León, cota situada casi en la mitad del camino español. Una buena parte de ellos proceden de Madrid, principalmente después de la inauguración de nuevas autovías y autopistas. Madrid sigue siendo nuestro mercado real y potencial más importante, y al que hay que dirigir con entusiasmo y medios nuestra promoción, junto a provincias limítrofes y otras regiones (País Vasco, Cataluña y País Valenciano), clientes, asimismo, con acentuado interés por la oferta leonesa. En Europa: Francia, Bélgica y Alemania. Solamente en Bélgica existe una Asociación de Amigos del Camino de Santiago que agrupa a más de 50.000 socios, en su mayor parte flamencos, hoy a la cabeza de la economía belga. Debemos negar el viejo dicho y afirmar: «El buen paño ya no se vende en el arca». Debemos sacarlo del polvoriento almacén, airearlo y mostrarlo en los mercados adecuados. Los leoneses somos muy proclives a la endogamia comercial. Promocionamos, promocionan con gran aparato, por ejemplo, nuestra Semana Santa dentro de casa (así se hizo en la pasada edición), en la misma medida que el Camino de Santiago, medio éste cuya actividad se extiende a lo largo de todo el año. Nos parece muy bien la programación prevista dentro de la ciudad pero, ¿en qué medida se ha difundido fuera de nuestras fronteras provinciales?, ¿se han utilizado redes hoteleras, grandes almacenes de implantación nacional, casas regionales, consulados europeos y oficinas españolas de turismo en Europa?, ¿qué actos institucionales y promocionales se han llevado a cabo en el inicio del Camino y su recorrido interregional? Hasta ahora creo que solamente en Oporto (¡) y en la feria Fitur, entregando folletos (¿del Jacobeo?) a coleccionistas de afiches publicitarios. Y ése no es el camino.