AQUÍ TE ESPERO
Hacer del proyecto realidad
TENEMOS los leoneses muy acendrada la manía de despotricar. Por muy bueno que sea algo siempre le encontramos la parte mala y así no hay nadie que se libre de los malos augurios cuando pretende hacer algo. Debemos de llevarlo en los genes, porque a menudo me pregunto por qué es difícil conseguir que la gente en general esté de acuerdo con tal o cual proyecto, que en teoría puede resultar beneficioso, y se suele oponer con razón o sin ella, esperando que el «porque lo digo yo» sea suficiente y contra él se estrellen todas las ilusiones y los proyectos. No andamos tan sobrados de ambas cosas como para que podamos permitirnos el lujo de zancadillear el futuro de la estación de esquí de San Glorio. Después de ver cómo se ha tratado a la estación de San Isidro, que podría ser de las mejores de España y apenas se ha desarrollado en treinta años (a ver si cuaja el campo de golf y los proyectos anunciados el lunes), me da miedo que no salga adelante el proyecto de San Glorio, que potencialmente tiene inmejorables recursos naturales y al estar en la confluencia con las provincias de Palencia y Cantabria puede significar un empujón a su puesta en marcha, habida cuenta de que en la vertiente cántabra se quiere tener el próximo invierno un remonte para acceder a las pistas de la vertiente leonesa. Es curioso que tengan que ser los vecinos (ocurre en San Isidro con los asturianos) quienes pongan más ganas, aunque no les sirve de nada si aquí no les dan los permisos y eso es difícil porque siempre alguien verá oscuros intereses o pensará que el dinero estará mejor destinado a otro fin, porque la climatología ... El sábado se reunieron dos mil personas en San Glorio para reclamar la estación y no faltó el presidente de la Diputación, que no quiere dejar pasar este tren, tan necesario para esa comarca. Pero mientras, la Junta se lo está pensando y puede cansarnos a todos con su inoperancia si no se decide pronto a apostar por el único proyecto que hoy puede revitalizar la zona.