VUELTA DE TUERCA
Descomposición de ETA
LA OPERACIÓN que ha conducido a la desarticulación de los «grupos de reserva» de la banda ETA y al responsable del aparato de captación de nuevos acólitos confirma, una vez más, que la información de que disponen las policías francesa y española acerca de los movimientos de los miembros de la organización terrorista es cada vez más fiable y depurada. Como ratas acosadas, se tienen que meter cada vez más adentro de sus madrigueras. Sin duda son acertados y prudentes los consejos del director de la Guardia Civil en el sentido de que, en ningún caso, debe bajarse la guardia. Pero también es cierto que asistimos, lenta pero implacablemente, a la descomposición, por una ácida mezcla de anacronismo y ridículo, de un grupo que ha denigrado hasta el límite el orgullo de ser vasco.