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Publicado por
CAMINO GALLEGO
León

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DENUNCIABA el domingo Tomás Gil, artesano fabricante de moscas de pesca, que «sin río no hay truchas, no hay gallos, no hay pescadores, no hay bares, no hay casas rurales, no hay pueblos. El río es la arteria vital de nuestras comarcas y el río se muere». Así de rotundo. Esa es la triste realidad en nuestra provincia, en la que en los años setenta la trucha era reina en los 3.000 kilómetros de ríos con una semana realmente internacional y cotizada. Hoy sigue celebrándose pero ni los ríos ni las truchas son las mismas en cantidad y calidad. Pero no quiero irme por las ramas, porque el río del que hablo no es truchero, a su paso por la capital. Me refiero a ese Bernesga encorsetado desde antes de la antigua Venta de la Chon, que da lástima. Y no sólo porque hayan pasado las fiestas, que tuvieron cita diaria en sus márgenes entre el puente de San Marcos y el de la estación y lógico es que alguna suciedad se produzca en estos casos. Pero lo que no es de recibo es cómo se encuentran el río entre el puente de la estación y el de la plaza de toros, la cantidad de basura en el cauce y en las orillas, dado que es el lugar ideal para el botellón diario de los jóvenes y que estos precisamente no se caracterizan por recoger sus desperdicios, aunque tampoco hay contenedores para que los depositen y las papeleras fueron destrozadas.. Cierto que en algún sitio tiene que reunirse la juventud, pero siempre me pregunto qué hacen en otros países, de los llamados civilizados, en los que parece que no suceden esas cosas. Desde luego es algo impensable en Francia, donde los ríos son venerados, como fuente de vida y progreso que son. Por eso me da vergüenza ajena que en un año jacobeo como el presente, cuando se supone que vendrán miles de peregrinos europeos, contemplen este desolador panorama y se lleven de nosotros una idea de pueblo bárbaro y sucio, que gasta millones en arreglar las orillas del río y luego no sólo no las cuida, sino que las ensucia y también el cauce. ¡Nos falta tanto para ser europeos!

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