Diario de León
Publicado por
FERNANDO ALLER
León

Creado:

Actualizado:

NO DEFRAUDÓ José Luis Rodríguez Zapatero las expectativas creadas desde que alcanzara la Presidencia del Gobierno, justamente hace ahora cien días. Tres mil millones de euros (medio billón de pesetas) es una cifra difícil de asimilar, imposible de interpretar en una provincia donde los habitantes y los empleos se cuentan de uno en uno, más los que se pierden que los que se ganan desde hace ya décadas. Ante casi trescientos periodistas, Zapatero compareció relajado y con rostro de satisfacción. Para abortar suspicacias y recelos, explicó previamente a los periodistas llegados de Madrid, Cataluña y de otros puntos de la geografía nacional, que España está en deuda con la zona Noroeste y que es preciso un impulso económico para fortalecer la cohesión entre las diferentes regiones del país, para hacer de la pluralidad una España más equilibrada. León, Zamora y Salamanca -explicó- han perdido 70.000 habitantes en los últimos diez años y la desertización se aventura a pocas vueltas de calendario si no se ponen en marcha medidas que lo impidan. La explicación no debió resultar suficiente, porque una afamada periodista de la tertulia radiofónica y del columnismo de prensa, preguntó si este tipo de Consejos de Ministros se van a prodigar por el resto de España, con la misma lluvia de millones. La importancia de los acuerdos adoptados estriba en que no se trata de anuncios políticos con carga electoral, sino de decisiones firmes del Gobierno de España, con la consiguiente consignación presupuestaria. Son, diría el presidente, puntos de partida para un futuro con otras iniciativas que han de llegar, decisiones con atractivo para la implantación de empresas o para el desarrollo de la investigación tecnológica, así como una apuesta en defensa de la Cultura como producto económico y de empleo. «Estamos ante un cambio de destino», subrayó Zapatero como colofón a las medidas anunciadas. Muchos, acostumbrados a tantos varapalos, pueden pensar que estamos ante el cuento de la lechera. Otros, como el alcalde de León, no tienen ninguna duda de que esto va en serio y también piensan, como el presidente, que estamos ante un «cambio de rumbo decisivo», en una situación que «provocará confianza y perspectiva» para que «quienes quieran puedan quedarse a vivir en esta tierra» y no se vean obligados a emigrar. No es débil la ambición. No ha sido pequeña la apuesta.

tracking