La manta y la hipocresía

¿SE PUEDE robar algo y venderlo con absoluta impunidad? Porque esto es lo que esta pasando con los discos piratas y es que ya va formando parte del decorado urbano de las ciudades y, en concreto, de la ciudad de León, los manteros vendiendo discos piratas con absoluta impunidad, ante la pasividad absoluta de la Policía y la bendición de parte de la sociedad. Como cualquier ciudadano sabe perfectamente, cuando compras un disco pirata estás colaborando con unos delincuentes -estás comprando algo robado- y obviamente lo estás haciendo, casi siempre, por ahorrarte un dinero. A partir de ahí comienza a funcionar nuestro mecanismo de autodisculpa. No vamos a reconocernos como delincuentes. Añadimos razones de caridad y solidaridad hacia los manteros, generalmente inmigrantes en situaciones precarias, y no nos ruborizamos al decir «hay que echarles una mano». «¿Los miles de personas que trabajaban en tiendas de música hace unos años no necesitaban que nadie les ayudara?». No pensamos que lo que conseguimos con nuestro ahorro es dejar sin trabajo al vecino, o a nuestro amigo, etcétera... Otras personas tratan de auto-disculpar su actitud seudo-delictiva diciendo «que los discos son muy caros, que las compañías cinematográficas y los protagonistas de las obras ganan mucho dinero». ¿Y si así lo fuera, que yo no lo creo, todo lo que sea caro, por el simple hecho de serlo ya se puede robar? ¿Por qué? ¿Qué es más caro, una película o un disco con la que toda una familia ríe o llora o se emociona o un simple cubata? Son casi 100.000 puestos de trabajo los relacionados directamente con el sector audiovisual. Frente a una compañía legal que paga impuestos, salarios, seguros sociales, etc., el pirata no paga más que el material virgen que utiliza, no paga impuestos y utiliza personas como «esclavos». Por mucho que se redujera el precio, el pirata siempre va a poder ofrecerlo mucho más barato. El coste de un DVD o un CD no es simplemente el del soporte en el que va grabado, incluye la amortización del coste de realización de la película, publicidad, distribución, impuestos, nóminas, etc. Salvo escasas excepciones, la exhibición de una película en las pantallas no amortiza los costes de elaboración de la misma; la mayoría de las producciones solo resultan rentables tras su distribución videográfica o incluso tras su difusión por televisión. Es cierto que algunos artistas ingresan grandes cantidades de dinero, igualmente que en otros sectores, pero esto es sólo predicable de un número mínimo comparado con miles de artistas que deben recurrir a otras actividades para garantizar la supervivencia de sus familias. Un vendedor-mantero independiente ingresa «limpios» más de 4.000 euros al mes, aunque la mayoría de los vendedores-manteros están vinculados a redes organizadas que les extorsionan y agravan aún más su situación al ir incrementando su dependencia de estas mismas redes que, a su vez, trafican con inmigrantes, prostitutas, drogas, etc., que utilizan los ingresos que obtienen para la refinanciación de mas actividades ilícitas. Hoy ya se sabe que las redes terroristas que estaban detrás del atentado del 11-M se financiaban con copias ilegales, no solo discos, sino ropa, relojes etcétera. Un kilo de cedés reporta 3000 euros y un kilo de resina de cannabis 1000 euros. Estas redes mafiosas se han dado cuenta que estos delitos quedan impunes y reportan mas beneficios que el trafico de drogas. Y aquí hago una pregunta: ¿si una red mafiosa y terrorista como ETA se financiara vendiendo discos piratas pensaríamos lo mismo, seguiríamos comprándolos de la misma manera? Cuando pagamos a un mantero o a un mochilero 4 o 5 euros, ¿realmente podemos sentirnos orgullosos del ahorro conseguido? Porque creo que el precio que pagamos resulta carísimo a toda la sociedad, ocasionamos daños irreparables. La verdad es que cuando compramos un disco pirata, o cuando desde la administración y los cargos de responsabilidad miramos para otro lado estamos colaborando con la delincuencia al más alto nivel.