Por Norma

VAN A ESTAR estos días de gira por nuestra comunidad. Es un aviso para que estén atentos y nadie se pierda la elegancia que desprende en escena la pareja formada por Norma Aleandro y Sergio Renán en Mi querido mentiroso , una espléndida teatralización de la correspondencia que intercambiaron el escritor irlandés George Bernard Shaw y la actriz Stella Campbell. Realmente podríamos seguir admirando el trabajo de la pareja aunque nos hubieran leído sobre las tablas la guía telefónica pero lo cierto es que la presencia sabia de los protagonistas se pone al servicio de un texto inteligente, irónico y pasional que huye de la mera declamación epistolar para entrar en el terreno del puro teatro. Es asombrosa la calidad de los intérpretes argentinos. Hace unos pocos años, giró por la red de la región El vestidor llenando salas con el nombre del protagonista, Federico Lupi. El público salía tocado por el trabajo de Julio Chávez, un actor de registros prodigiosos desconocido en España. En estos últimos meses, el «boca a boca» entre los espectadores madrileños han conseguido colgar el cartel de «no hay localidades» durante un año en El diario de Adán y Eva , donde un Miguel Ángel Solá en estado de gracia ofrece toda una cátedra de interpretación. Son algunos brillantes ejemplos de un oficio que en Argentina ha sabido mantener la tradición heredada de la escena española del primer tercio del siglo XX, perdida en España en la noche franquista y no recuperada por las ansias de la transición, sin perder la conexión con los movimientos internacionales de renovación. El resultado va a estar estos días en algún teatro cercano. Usted, por Norma, no puede perdérselo.