Política a golpes
LA TENSIÓN acumulada durante el Congreso del PP valenciano, en el que compitieron los «zaplanistas» y los partidarios de Camps, con un resonante triunfo de estos últimos avalado por la dirección nacional, ha desembocado en un enfrentamiento cuerpo a cuerpo en los prolegómenos del congreso de dicha formación política en Alicante, donde los «zaplanistas» son mayoría. Un cruce de acusaciones sobre irregularidades en la votación de compromisarios terminó a bofetadas en Elche. La policía tuvo que intervenir e incautó las urnas, y se han cruzado diversas denuncias entre los contendientes. Éste es el resultado de fomentar rivalidades fraccionales y de alentarlas hasta la exacerbación. Los electores no suelen perdonar estas fracturas tan clamorosas.