Quién fuera tránsfuga en paro

QUE NO se me olvide llamar hoy mismo al presidente de Ebro Agrícolas, José Manuel Fernández Norniella, para pedirle trabajo. Los periódicos traen que el concejal leonesista De Francisco -permítasenos no apearle el tratamiento, porque es el de toda la vida y no tiene otro- telefoneó un día a Norniella, fue recibido al otro en su despacho y le ofreció, así de primeras, un empleo de veinte millones de las antiguas pesetas, que, sin llegar a los cuarenta millones con que contaba el concejal, por lo menos dan para ir tirando. Pero, como a este último le parecía poco, puso una moción de censura. Ésta es la versión oficial de los hechos, según consta en las actas del último consejo de administración de Ebro Agrícolas, a las que dice haber tenido acceso la Cadena Ser , aunque no un servidor y eso que es de tierra de remolacha (La Bañeza, 1953). Así que no fue el PSOE el que le ofreció una «jubilación dorada» a De Francisco por retirarse de la política, sino que se ofreció él mismo y no precisamente de saldo. Si cuela, cuela, pero se le podría dar una azada al señor fiscal para que cave hasta la raíz del asunto, no vaya a ser que también él tome la remolacha, y el rábano, por las hojas. ¿Opina el señor fiscal que Norniella preside una oenegé para ediles de pueblo en paro? ¿Ha mejorado tanto el talante de los empresarios desde que llegó Zapatero al poder que reciben a cualquiera y le nombran director del patrimonio de la empresa con piso en Madrid y derecho a bono bus por toda España? ¿No había otra vacante más a mano, por ejemplo encargado de la báscula de la azucarera de La Bañeza?. Es lo que le dije ayer a mi mujer: «Éste es Norniella, un tipo sensible que practica una política de puertas abiertas y no como donde trabajo yo, y, además, en casa nos conformaríamos con menos de lo que pide De Francisco, así que, chati, está chupao» . El patrón me dijo que sí, pero saqué la conclusión de que quería largarme a cualquier precio, como a un vulgar concejal. De modo que aquí sigo, por si acaso.