Pese a los dos

SEGÚN avanza la campaña del referéndum de la Constitución de la UE, en vez de «a menos», las diferencias entre los dos grandes partidos del «frente del sí», el PSOE y el PP, van «a más». ¡Y eso que están de acuerdo...! Dos estrategias partidarias de carácter doméstico totalmente ajenas al objetivo europeo que dicen compartir, tienen, en mi opinión, «la culpa» de este esperpento: la decisión del PSOE de diferenciarse todo lo posible del PP cara a las próximas elecciones vascas por entender que así tienen más posibilidades de arrebatarle al «plan Ibarretxe» la mayoría absoluta que le auguran las encuestas, y el deseo del PP de no contribuir con un sí sin matices al éxito del «plebiscito a favor de ZP». Además de para su «estrategia vasca», subrayar el escaso entusiasmo con que el PP está pidiendo el sí a la Constitución de la UE le sirve a los socialistas, a), para ir convirtiendo a Rajoy y a su partido en una bonita «cabeza de turco» a la que responsabilizar del fiasco si la participación que registra finalmente el referéndum resulta ser tan escasa como la que se pronostica, y b) para apartar los focos de un escenario que no les interesa iluminar: el rotundo fracaso político que han cosechado los muchos esfuerzos de ZP para atraer a sus socios de ERC e IU a la causa del «sí» o al menos de la abstención. Y, además de desgastar a ZP, la estrategia «antiplebiscito» del PP persigue denunciar el intento de los socialistas de culparles «preventivamente» del eventual «muerto», e iluminar justo lo que ZP le interesa oscurecer. Pero, que algo sea explicable, en política, no significa que sea comprensible.