AQUÍ Y AHORA
Estupefacciones
EN LA ESPERA del referéndum de la Constitución Europea, me quedo estupefacto al escuchar a Ángel Acebes decir que esa reunión Zapatero-Rajoy de octubre, desvelada ahora por Zapatero, debería ser algo normal entre el presidente del Gobierno y el jefe de la oposición. ¿Qué pasa, ya se le olvidado que Aznar en cuatro años recibió a Zapatero menos veces que éste a Rajoy en diez meses? ¿Cómo nos explica ahora Rajoy su visita secreta a la Moncloa, tan secreta que en los cuatro meses transcurridos no se ha filtrado nada hasta que el propio Zapatero la ha desvelado, supongo que por estar hasta las narices de escuchar estupideces? Yo dije que no me gustaba el secretismo en las entrevistas con Imaz y Carod. Pues mucho menos me gusta el secretismo de la reunión con Rajoy, mucho más importante por tratarse del jefe de la oposición. Y todavía menos me gusta que el PP y su presidente mantuvieran un secreto que luego se han hartado de reprochar a los demás. Mi estupefacción llega a unos grados indescriptibles. Como en el caso del referéndum del domingo, al ver que Rajoy y sus muchachos se han hartado de asegurar que el Gobierno ha hecho muy poco por que la gente vaya a votar sí, y que los que han hecho mucho son ellos. Cosa rigurosamente incierta y exactamente al revés de la realidad, como todo el mundo ve y sabe. Si el referéndum fracasara, yo tengo clarísimo de quién sería la culpa: de los desanimadores del PP, que han instado a votar sí con la boca chica y con deseo evidente de que la consulta fuese un fracaso.