Contra los contratos ilegales

EL PROCESO de regularización de inmigrantes que actualmente trabajan irregularmente está yendo más despacio de lo previsto: en los 16 primeros días, han presentado solicitud de regularización sólo 48.247 personas en toda España y el 40% de ellas están relacionadas directamente con el empleo doméstico. A este ritmo, es improbable que se regularicen los cientos de miles de empleados en situación ilegal que actualmente laboran en la economía sumergida. Para hacer frente a este contratiempo, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, ha anunciado que la Inspección de Trabajo emprenderá un vasto plan de inspección, con más de medio millón de actuaciones, en cuanto finalice el plazo del actual proceso de regularización. No va faltarles el trabajo a los inspectores.