Fiscal contra Batasuna

SE SABE desde hace tiempo que la ilegalizada Batasuna iba a hacer todo lo posible por incrustarse en el Parlamento vasco y el mejor medio para tal fin sería, y es, presentar una candidatura de nombres sin especial resonancia en el ambiente del radicalismo aberzale, personas libres de sospecha de apoyo al terrorismo etarra o de complacerse en él. Ayer reconocía el fiscal general del Estado que existe una prueba documental en la que una dirigente de Batasuna explica a un dirigente de ETA en prisión la estrategia a seguir en el proceso electoral: presentar una candidatura legalmente inviable y otra de apariencia inocente. La candidatura que albergaba los nombres más conocidos de la coalición filoetarra se ha visto obviamente rechazada, pero la otra, bajo la denominación Aukera Guztiak, está siendo minuciosamente analizada por las Fiscalía General del Estado, que el martes próximo decidirá si la impugna o no. La prueba documental de la que el jefe de los fiscales, Conde-Pumpido, hablaba ayer -la estrategia batasuna de presentar dos listas- no demuestra que Aukera Guztiak sea una de ellas, la que en forma de medusa transparente y, por lo tanto, medio invisible pretenda sentar en los escaños legislativos de Vitoria. El PNV está en cierto modo con el alma en vilo porque sabe que una opción política bajo el amparo batasuno le quitaría votos suficientes para no conseguir su soñada mayoría absoluta. Rajoy clamaba desde el pueblo madrileño de Pinto, que forma un gracioso binomio con su vecino Valdemoro, por la impugnación de la candidatura AG, sobre la que «hay pruebas inequívocas» de que está presentada por gente de Batasuna, añadiendo que si fuera autorizada a participar en las elecciones, ello «sería terrible, sería un retroceso de enormes proporciones» en la lucha antiterrorista de los últimos años. Un portavoz de Aukera Guztiak reavivaba ayer su postura contraria «a toda conculcación, a toda violación de los derechos humanos», y añadía que se condenan el terrorismo como se les exige, con puntos, acentos y comas, no sería suficiente, y les obligarían a pagar cualquier otro peaje. Se muestra el Gobierno tan respetuoso con la aplicación de la ley a esta situación preelectoral de Euskadi, sin adelantar sus preferencias políticas, que no se sabe si, en el fondo, los socialistas preferirían que una opción más radical que el nacionalismo democrático privase al PNV-EA de la mayoría absoluta o si el enfrentamiento debiera ser, cuerpo a cuerpo, entre el PSE-PSOE y PNV, para medir la exacta dimensión de sus respectivas fuerzas. El fiscal Conde-Pumpido parece inclinado a impugnar la candidatura sospechosa, contra la que se van amontonando indicios.