La velocidad y el realismo
LA DIRECCIÓN General de Tráfico ha emprendido ahora una campaña de control de velocidad, que será vigilada en 1.912 tramos de la red viaria, convenientemente anunciados a los conductores. Sin duda, la iniciativa es loable -el exceso de velocidad es la segunda causa de muerte en los siniestros de carretera- pero probablemente poco eficaz. El problema de la siniestralidad vial es muy complejo. El cumplimiento de los límites de velocidad establecidos, demasiado bajos para los potentes automóviles de hoy día, no se logrará evidentemente a través de una campaña de un par de semanas. Requiere la instalación de una red estable de radares fijos y móviles y, probablemente, un mayor realismo en la fijación de las limitaciones, sobre todo en autovías y autopistas