Diario de León
León

Creado:

Actualizado:

UNA CASA no siempre es un hogar, ya lo cantaba el gran Willie Nelson.  El término hogar además de espacio físico concreto implica la existencia de un destino voluntariamente compartido, de un territorio del amor incondicional. Cuando todo falla y necesitas la caricia protectora de quienes no te miden por éxitos o fracasos, cuando tus corazas más fuertes han sido traspasadas y necesitas ser quien realmente eres... entonces... regresas. Ulises no retornó solamente a su casa, en Itaca, lo hizo a su hogar; es decir, con los suyos, con su familia. Puedes tener muchas casas, pero no varios hogares. Es en el hogar donde uno se forja y renace. Los gais quieren tener hogares, no guetos donde vivir todos juntos.  Su causa es una de las pocas reivindicaciones colectivas que tiene como pilar el derecho al amor y a la familia. No obstante, en esta polémica prefiero no hablar a la ligera de reaccionarismo, pues hay muchas buenas personas contrarias al matrimonio homosexual, no por ser intolerantes sino por reticencias heredadas. Paciencia y respeto,  en los dos posicionamientos, pues no todas las discrepancias son malas. Cuántos padres han aceptado amorosamente lo que en principio les parecía una negación de sus valores religiosos, de su lógica.  Erradicar estos temores infundados está siendo el gran logro del movimiento gai, que ha sabido comprender que no estaban ante una nueva etapa del movimiento de liberación sexual,  sino ante un reto mucho más profundo. Con o sin matrimonio homosexual ya han ganado. Porque el amor siempre gana, incluso cuando pierde.

tracking