EN POCAS PALABRAS
Turquía, el gran dilema de la UE
LA COMISIÓN europea mantiene el 3 de octubre para el comienzo de las negociaciones de adhesión de Turquía, a la que se le han impuesto las condiciones más duras de la historia. El dilema ni siquiera debería plantearse cuando el gobierno turco que sostiene la solicitud de ingreso se reconoce «islamista». Este solo hecho ya demuestra que los códigos políticos turcos no coinciden con los europeos. Europa, decaída y postrada, no es hoy lo bastante fuerte para admitir a la Turquía actual en su seno con la esperanza de que evolucione políticamente hacia la fórmula democrática, laica y garantista que está homologada en la UE. Lo lógico sería posponer el ingreso, y aun las negociaciones previas, hasta que los turcos, si es su deseo, evolucionen hasta interiorizar los grandes paradigmas europeos.