¡Ya está bien!
Soy una madre de ex-alumnos del colegio Público San Claudio. Por otras madres me he enterado que Mariam, la profesora de preescolar, se retira después de 9 ó 10 años en San Claudio, y yo, como madre de un ex-alumno, me gustaría dedicarle esto: Simple y llanamente decirle muchas gracias por todo lo que has hecho por nuestros hijos, no sólo a nivel académico, que ha sido mucho, sino que les ha enseñado a compartir material, juegos, etcétera, les ha enseñado a ser amigos de todos, a saber decir la verdad, a distinguir las cosas bien hechas de las mal hechas, en una palabra: les ha encauzado para ser buenos niños y luego adolescentes, gracias por todo esto y por mucho más. Para finalizar, sólo decirte que te mereces ya disfrutar de un retiro y de tu familia, sabiendo que has cumplido tu función en la docencia con mucho éxito, y orgullosa de ser así, gracias por todo. Lo que bien se aprende nunca se olvida. Eso los alumnos lo saben y contigo lo han aprendido bien, y el árbol se forma desde abajo; ellos en casa y luego a los tres años en el colegio se han ido formando gracias a ti. Gracias una vez más, por ser como eres y estar feliz por cumplir a la perfección con tu profesión. M. J. Rodríguez (León). Soy socialista, no como ustedes. Me parece bochornoso y lamentable el espectáculo que han dado el pasado lunes en el salón de plenos del Ayuntamiento al votar en contra del homenaje a la corporaciones democráticas ¿quiénes se han creído que son? ¿En nada me siento representada por su talante, y creo que no es de recibo que decidan evitar este homenaje, señor Amilivia, ¿no es suficiente la mayoría que tienen? ¿No pueden votar también los que han sido alcaldes, concejales o presidentes de juntas vecinales o sus familiares en su defecto? En ese caso se quedarían solos el señor Fernández y el señor Chamorro. Su argumentación para votar en contra demuestra lo democráticos que son. Me gustaría que opinara la familia de Gregorio Pérez de Lera cuando los de su propio partido paralizan un homenaje al primer alcalde de la democracia ¡Qué vergüenza! Ana María Sánchez Alonso (León).