Bajo coste y alarma aérea

UN SEGUNDO accidente de aviación en pocos días, ocurrido al estrellarse un charter colombiano con pasaje francés en El Caribe, con un saldo de 160 muertos, tras el de una compañía chipriota en el Mediterráneo con un balance igualmente trágico, pone abiertamente en cuestión la seguridad en las compañías de bajo coste. Esta secuencia de accidentes será sin duda lesivo para las compañías de precios baratos pero tendrá también un indudable efecto disuasorio sobre la aviación en general. De ahí que se eche en falta una intervención autorizada de los organismos reguladores internacionales y una respuesta clara del sector que tranquilice a los usuarios y permita distinguir entre compañías solventes e insolventes en este asunto clave: el de la seguridad.