Realismo europeo

EL PRESIDENTE de la Comisión Europea, Durao Barroso, ha optado por no seguir disimulando el fracaso irremisible e irreversible de la Constitución Europea: el ex primer ministro portugués declaró el miércoles en Bruselas que nadie debe llamarse a engaño al respecto: no habrá nueva Constitución antes de «dos o tres años». Tendrá pues la UE que actuar con realismo, abandonar el viejo proyecto y «pasar a la ofensiva» dando salida a otros proyectos realizables e imprescindibles, como los presupuestos para el período 2007-2013, que están todavía en el alero. Las declaraciones son asimismo un jarro de agua fría que apaga la previsión, adoptada por los líderes de la UE, de «abrir un período de reflexión» sobre la carta magna para regresar sobre el asunto en el primer semestre del 2006.