Cerrar
Publicado por
PANCHO PURROY
León

Creado:

Actualizado:

EL SECANO de León, rastrojera y adil polvorientos, parece un paisaje de Marruecos, eso sí, sin chilabas ni burros. Termina la vendimia, con unas uvas maduras y azucaradas que prometen buena añada a los caldos del prieto picudo y la mencía. Andan los seteros desesperados con la seca, y más ahora que se ha presentado la primera escarcha, enemiga de yemas de huevo, apagacandiles y hongos negros, aunque aún esperan unas lluvias que auspicien la eclosión de la seta de cardo en los eriales y el níscalo entre la pinocha. Los jabalineros se hartan de jalear a unos perros que, exhaustos por la calorina y el suelo seco, se echan a sestear a la media hora de iniciarse la montería. Las menguadas vetas de agua de los ríos ni se ven entre la fronda de espadañas y cárices que medran en la cascajera. Emigrantes forzados desde los pueblos anegados por el pantano acuden a contemplar, en los entornos de Luna y Villameca, las ruinas barrosas de aquellas aldeas donde tuvieron sus raíces. La sequía ibérica no es obstáculo para observar en estas fechas la migración de las aves. Acaban de marcharse al África subsahariana, al Níger y Senegal de donde apeonan los pobres que pretenden hacerse ricos en Europa asaltando la valla de Melilla, las últimas golondrinas y aviones comunes, ya sin moscas que llevarse al pico. El cernícalo primilla, depredador de saltamontes, y la aguililla calzada, captora de pollos de torcaz y mirlo y lagartos ocelados, rapaces que se han ido a cruzar el Estrecho y el Sahara, son sustituidos por el vuelo de los primeros milanos reales, amigos de los vertederos, y de los esmerejones, hábiles en perseguir alondras. Bandadas de lavanderas blancas aterrizan en los prados regados y plétora de pinzones y verderones gustan del maizal, mesa puesta para pájaros granívoros. Los humanos gozamos las fiestas de San Froilán, tras el eclipse que llenó León de cielo azul mate y luz rojiza, dedicados a saborear pulpo, morcilla, avellanas y nueces. A ver si llueve.