Del Cylog al Teleno

LA CONSEJERÍA de Fomento, que dirige el leonés Antonio Silván, presentó el pasado viernes en Valladolid el Cylog. ¿Y qué es eso?, me pregunté al ver las siglas. Bueno, pues algo así como la red logística de Castilla y León. El modelo está copiado directamente de aquellas directrices de ordenación del territorio confeccionadas por el ex consejero José Luis Valvé, aquel al que sus opositores llamaban «el Anelka de la política en Castilla y León». Centraliza toda la red logística autonómica en Valladolid. Es más: incluso el nombre del centro de transporte de Valladolid se llama Centrolid. Para que no existan dudas. Pero, claro, esta red de logística es tan artificial que para que Valladolid sea el centro del Noroeste, hay que ignorar la existencia de la segunda ciudad portuguesa, que es Oporto, y en cambio buscarle una salida a una ciudad bastante menos importante, como Aveiro. Vaya por delante que escribo de este tema y sólo co ntemplo un paisaje de sombras. O de niebla. No acabo de digerirlo. Sin embargo, la lógica de la razíon me dicta lo siguiente: Cuando estas redes y estructuras se diseñan según los intereses de Valladolid e ignorando al resto de la comunidad autónoma de Castilla y León, el doble efecto se resume así: en primer lugar, están condenadas al fracaso, y en segundo lugar, se sigue abriendo el foso existente entre, por ejemplo, Valladolid y León. Pero no deseo perderme entre las redes del Cylog. Quiero vocear una buena noticia. Como titulaba ayer este periódico en su primera página, el Ministerio de Defensa limita el ejercicio con fuego real a la mitad de la superficie del Teleno. Si resucitara Tulio Máximo, aquel poeta romano que recorrió hace dos mil años sus laderas y se embelesaba con la blancura perpetua de sus cimas, reescribiría sus bellos exámetros en piedra. O tal vez Leopoldo Panero consagraría aún más al mítico Mars Tilenus . En el Teleno ya no quedan nieves perpetuas, ni existen neveros para conservar el pescado. Des de hace demasiados años ha sido campo de batalla. Pero algo ha cambiado en el Ministerio de Defensa. Parece que, a partir de ahora, va a tener en cuenta las necesidades y sensibilidad de la comarca de Maragatería en la que está el campo de tiro. Se trata de compatibilizar la existencia de ese campo de tiro con las gentes que viven allí. Ambas actividades no pueden ignorarse, y mucho menos, puede tratarse con indiferencia a ese territorio. Lo ocurrido este verano, con los sucesivos incendios, que se expandieron por no ser sofocados a tiempo, son episodios que no pueden repetirse. Si a partir de ya, además, el Ministerio de Defensa colabora con 300.000 euros anuales y favorece nuevas infraestructuras para esos pueblos, el cambio resulta evidente. Sobre todo porque con esos fondos se financiarán propuestas de infraestructuras y medios de prevención que sugieran los vecinos. Los artilleros de Astorga, al igual que los mineros, celebran hoy la festividad de su «santa dinamitera», Bárbara. Pueden ponerle un sí bemol al tono de su alegría. Igual que lo hará el Colegio de Ingeniería Técnica de Minas al homenajear hoy a Félix Alonso Valbuena, todo un clásico, tanto en la profesión, como en la vida colegial.