Divorcio exprés

Esta Semana Santa nos visitó el que fue lateral derecho de la Cultural Leonesa Godoy, quien vistió la camiseta con el número 2 durante las temporadas 69/70, 70/ 71 y 71/72, posiblemente el periodo más glorioso del equipo de fútbol de la capital, después de su militancia en Primera División. Graciliano Godoy Durán nació en Las Palmas de Gran Canaria, en el año 1942. Comenzó en el fútbol siendo un niño, militando en equipos de infantiles de Tenerife, para seguir en los juveniles de la Unión Deportiva Las Palmas, hasta llegar al primer equipo de la isla, la U.D. Las Palmas debutando en Primera con 21 años. Fichó por el Logroñés al siguiente año, regresando a la U.D. y posteriormente al Tenerife, en las categorías de Tercera y Segunda División. Siempre había ocupado la posición de extremo derecho, por su verticalidad y rapidez, hasta que llegó a la Cultural, en la que jugó de lateral derecho. Siendo jugador del Tenerife, en 1969, a los hermanos Fernández Rabanal, que dirigían la Cultural, les llegan buenas referencias de las características del juego de Godoy, rea lizando su fichaje, adelantándose al Lérida, en cuya ciudad se encontraba haciendo una prueba. Siendo Rafa el entrenador de la Cultural, en la temporada 69/70 se consigue el ascenso a Segunda y es cuando se consolida el emblemático equipo que tantas tardes de gloria dio al deporte leonés formado por: Bernardo; Godoy, Maño, Paredes; Piñán, Roldán; Ovalle, Villafañe, Marianín, Larrauri y Zuazaga. Recuerda con gran cariño a todos los compañeros con los que coincidió en las tres temporadas que estuvo en León, como Félix, Larraz, Gómez, Mundo, Purri, Casas, Iglesias, Gerardo, Diego, Hernández, Seo, así como Manolín el utillero, Mohíno el masajista... Siendo presidente Ángel Panero, el entrenador Vallejo decidió prescindir de Godoy, causando gran sorpresa su decisión, rompiéndose, con otras bajas y traspasos, la maquinaria de aquel equipo, lo que condujo al descenso a Tercera División, al año siguiente de la marcha de Godoy. Regresó con su familia a Las Palmas, apenados por la triste salida de la Cultural y tal fue su desilusión que ya no volvió a jugar más al fútbol, a pesar de las ofertas que le llegaron de la Península. Pero siguió en el fútbol, ya que sacó el título de entrenador, y ejerció como tal en las islas con singular éxito, ya que consiguió ocho ascensos con distintos equipos, destacando siempre por la exigencia que imponía a sus jugadores. Después de estos largos 33 años sin haber vuelto a verse con sus compañeros de tantas tardes deportivas de gloria, el sábado 15 de abril se reunió con varios de ellos, y al frente estaba su presidente en la Cultural, Luis Fernández Rabanal, al que profesa un gran respeto y cariño, reviviendo tantos felices momentos. Los partidos se contaban por victorias ante equipos como Oviedo, Castellón, Elche, Sabadell, Pontevedra o Zaragoza, contra el que se vivió uno de los momentos más felices de la historia de la Cultural, al igualar un resultado adverso de 0-3 y que casi se convirtió en victoria en el último minuto. Godoy era el dueño de la banda derecha, e igual subía atacando y marcando goles, como regresaba con rapidez a su puesto en la defensa. Era un jugador comprometido con el equipo. Nunca ha perdido el contacto con León, en donde tiene grandes amigos. Dice que la Cultural merece ascender de nuevo a Segunda División, para lo que, recuerda, se debe trabajar y arriesgar con la cantera, pues en aquella maravillosa etapa que vivió, la mayor parte de la plantilla era de León o de la provincia y los jugadores de fuera, se veían arrastrados por la garra y pundonor de los que eran de León. Sabe que en los últimos años casi no ha jugado gente de León, y que en la actualidad en el equipo titular hay un jugador y en la primera plantilla solamente dos de León. Preguntado si le gustaría entrenar a la Cultural dice, emocionado, que por ilusión y ganas vendría feliz, pero su salud no se lo permite, pero que no le importaría colaborar con la Cultural, desde Las Palmas, localizando buenos jugadores, a los que conoce y ha entrenado, haciendo las gestiones para que jueguen en León. Sin duda, es un gran amigo de León, y de nuestro primer equipo, al que no olvida. J.A. de Celis y otros inco ndicionales de la Cultural (correo electrónico) La única forma de creer en las condenas firmes del terrorismo es partiendo del cumplimiento de la ley y las normas, siempre y cuando éstas sean justas y estén aprobadas por procedimientos válidos en Derecho. ¿Como se puede creer en un gobierno que apoya la aprobación de estatutos totalmente imposibles de encajar en la Constitución que como norma suprema que es está por encima de todas las demás? Jerarquía normativa y seguridad jurídica son dos principios de capital importancia, algo que debería saber a la perfección cualquiera que haya estudiado Derecho. Mario G. (edición digital) Sólo hay una forma de poner coto a esa desfachatez-guarrada de que los perros anden sueltos y caguen en las aceras y delante de las puertas de las viviendas (nunca son las del dueño de los canes). Digo: vigilancia, cumplir la ley y poner las sanciones correspondientes... y hacerlas públicas para escarmiento. Jacinto Gutiérrez (León) Manuel (Madrid; edición digital).