Un repaso

L AS ZONAS verdes de la ciudad necesitan un repaso de vez en cuando y no siempre llega a tiempo. Podría empezar por hablar de la que separa la avenida de la Facultad del paseo de Papalaguinda, que ya hace veinte años (véase la hemeroteca) que se anunciaba su inminente remodelación y dos décadas después siguen diciéndolo de vez en cuando. Y así está. Podría también hablar del parque que hay en San Mamés, del que un amigo espera desde el pasado otoño que alguien se acerque y arregle el pavimento, «porque -me decía- cuando llegue el invierno (se refería al pasado) todo serán charcos», y miren que ha llovido, así que se pueden imaginar cómo estará ahora ese suelo, de un lugar que por tener tanta población siempre está abarrotado. «Y, de paso -me decía también mi amigo- podían pintar la pasarela que lleva al parque desde el otro lado de la vía». Desconchada y forroñosa, presenta un lamentable aspecto de dejadez. Pues así está también. Y el tercer lugar del que hablar es esa explanada de hierba que hay delante del edificio de la Junta, que quedó agostada después de estar bajo las tarimas de «Leer León». Entre lo que tardaron en montar las carpas, la semana de la feria y otros ocho o diez días para desmontarlas, lo cierto es que estuvo casi un mes sin riego y ahora riegan para conseguir que tenga otra vez el color verde. No servirá de mucho, porque el pasado fin de semana otra vez hubo mini carpas allí y antes de que nos demos cuenta habrá conciertos de San Juan. Así que creo que sería mejor quitar esa hierba y ponerlo todo de cemento. No se estropearía tanto, ni costaría el mantenimiento de la hierba para volver a destrozarla otra vez poco después.