Diario de León

LA VELETA EL MIRADOR RAMÓN EN POCAS PALABRAS

Vivir y transigir UE: astenia e incertidumbre Europa toma conciencia Policías contra fiscales

Publicado por
XOSÉ LUÍS BARREIRO RIVAS 1397124194 FEDERICO ABASCAL
León

Creado:

Actualizado:

SI SE LEE AL CATECISMO ad pedem litterae , y se acepta que el uso del preservativo es pecado, que el aborto es un crimen y que no cumplir con el precepto dominical es una falta grave, se concluye de forma apodíctica que nadie, ni siquiera Teresa de Calcuta, se ha librado del infierno. Pero el pueblo cristiano sabe muy bien que eso no es así, que las leyes hay que saber leerlas, y que no está demostrado que nadie haya entrado en el infierno -ni siquiera Hitler- después de Satanás. Pues a la ley de los hombres le pasa lo mismo. Si nos ponemos a mirar lo que cabe y lo que no cabe en el Estado de derecho, y si hacemos una rígida traslación de la ley a la vida, acabaríamos multando a la Guardia Civil de Tráfico por incumplir el Código de la Circulación, emplumando a los jueces por enredar políticamente con los procesos, llenando las cárceles de trapicheros, retirándole el carné de conducir a todo el mundo y emplumando a millones de ciudadanos por fraude fiscal. Pero la vida tiene mejores pautas para el gobierno de las cosas, y a nadie se le ocurre denunciar al chofer del rey cuando nos adelanta a 180 kilómetyros por hora en una autopista. La Santa Transición -que así se llamará, al paso que vamos, la muerte del franquismo- salió adelante porque nadie quiso revisar la Guerra Civil ni los crímenes de la dictadura, porque los jueces del TOP no fueron expulsados de la carrera judicial, porque los torturadores de la brigada social ascendieron a comisarios al servicio de la democracia, porque nadie exigió que se revisase la legitimidad de la monarquía ni la forma del Estado, y porque durante varios años se renunció a aplicar ciertas leyes del franquismo que estaban vigentes y que, en caso de ser aplicadas, podían dar al traste con el proceso que nos estaba conduciendo a la democracia. Por eso no entiendo que en este bendito país, que tanto sabe de leyes y de vida, y que conjuga y equilibra ambas cosas con maestría infinita, esté surgiendo con tanta fuerza la secta de los vigilantes de la ortodoxia y el rigor legal. Se trata de verdaderos inquisidores privados que, un día tras otro y en cada paso que damos, nos vienen a recordar que, si se cumple la ley en su estricta literalidad -o si aplicamos el Estado de derecho (sic)-, es imposible ir al cielo, transigir en los conflictos sociales y políticos, moderar con criterios sociológicos el peso de la ley, o mantener en el bolsillo el carné de conducir. Mariano Rajoy lo dice todos los días: «lo que hace falta es actuar con decencia y sentido común». Lo dice, claro está, pero no lo aplica. Porque toda su fe se agota en el Estado de derecho, sin dejar sitio para una concepción inteligente de la sociedad y de la vida . EL PRESIDENTE Zapatero ha considerado un éxito que se haya dado un salto cualitativo en el problema de la inmigración ilegal, al enfocarse a partir de ahora con visión global de toda la UE. Añadió el presidente español que la UE pretende asegurar una inmigración razonada, con reglas, y garantizar la máxima cooperación con los países de los que salen sus ciudadanos por exceso de pobreza y falta de esperanza. Se ha esforzado Zapatero por implicar a la cumbre en el problema migratorio que tan especialmente afecta a España, y en esa labor parece haber obtenido buenos resultados. Pero estos esfuerzos habrían sido innecesarios si el Tratado Constitucional de la UE no hubiera naufragado en Francia y Holanda. Esta cumbre de Bruselas ha improvisado medidas y colaboración para mitigar el problema inmigratorio, cuando el texto constitucional desairado por los electores holandeses y franceses ya planteaba acciones conjuntas en gran variedad de asuntos, la inmigración entre ellos. Va a seguir reflexionando la UE sobre sí misma en general y sobre alguna forma de desbloquear el proceso constitucional paralizado en especial, con la debilísima ilusión de que en dos años, antes de que termine el 2008, se hayan disipado las incertidumbres, alguna al menos, y pueda funcionar el conjunto de los veinticinco países con solvencia política, financiera e institucional. Durante este largo período reflexivo se teme que Francia no vaya a representar el papel de pensador cartesiano de costumbre, lo que para el futuro europeo no es estimulante, especialmente porque la ampliación hacia diez nuevos socios del este ha desequilibrado en cierto modo la balanza anterior, y la pérdida de peso francés acentúa ese desequilibrio. Algo sí se ha visto claro en este reunión de jefes de Estado y de Gobierno, y es que la UE, aunque acepte los dos nuevos países de ingreso ya acordado, sea el año que viene, o un año después, si presentasen mal hechos los deberes, va a cerrar sus puertas durante un tiempo, presumiblemente largo, hasta comprobar que ha alcanzado suficiente solidez interna para recibir a algún país más, sea Croacia a relativamente corto plazo, sea Turquía, sabe Dios cuándo. Y si sobre inmigración hay muy buenas palabras, sobre otro problema de envergadura, como es la política energética, la cumbre ha adoptado la única solución para la que se sentía capacitada: aplazar el estudio de la cuestión hasta otra cumbre, posiblemente la de otoño, si en esa no se pospone a la de primavera. No se recuerda en medio siglo de progresiva unión europea un momento en el que Europa padeciera una astenia tan aguda y persistente actualmente, y desde que dos referenda echaron por tierra una Constitución elaborada por sesudos expertos, pero sin enseñársela a los ciudadanos hasta la hora de votar. Por eso algunos cotaron como votaron . ZAPATERO y Durao Barroso lanzaron en Europa el debate sobre inmigración Aunque no se adoptaron decisiones, los Veinticinco mostraron su solidaridad con España por la llegada masiva de inmigrantes, y coincidieron en la necesidad de aumentar la cooperación con África, de incrementar la lucha contra el tráfico de personas y de mejorar la integración de los recién llegados y sus descendientes. Las conclusiones de la cumbre aprobadas refuerzan las medidas comunitarias de apoyo España ya adoptadas por la UE pero, además, la Comisión Europea prepara un dispositivo de ayuda a España, nunca desplegado antes en el seno de de la unidad de países. Por puro egoísmo, la Unión Europea tiene que comunitarizar el problema, que afecta al conjunto de sus socios. LA FISCALÍA y la policía mantienen una absurda disputa pública sobre el error que auspició la puesta en libertad de cinco delincuentes detenidos en el interior de un banco, armados hasta los dientes y con un largo historial a sus espaldas. El caso ha servido para que todos nos enteráramos de que la fiscal que no pidió prisión para los atracadores ni siquiera estaba presente en el momento en que el juez tuvo que decretar la puesta en libertad y que un porcentaje alto de delincuentes detenidos por robo no llegan a ingresar en prisión porque la fiscalía tampoco lo solicita, lo que lleva a los sindicatos policiales a sospechar que está blandura del ministerio público se debe a razones de política penitenciaria: ya no caben más presos en las cárceles. Sigue siendo necesaria una aclaración.

tracking