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Publicado por
ANTONIO NÚÑEZ
León

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LAS CAJAS de ahorros, que hasta hace bien poco añadían al nombre de su ciudad o provincia la coletilla de «y monte de piedad», no son de nadie, así que todo el mundo quiere quedárselas. Fueron fundadas a comienzos del pasado siglo por la Real Sociedad Económica de Amigos del País mediante aportaciones desinteresadas de caballeros de la época que, con un poco del dinero que les sobraba a cada uno de ellos, lograron acabar con la usura. Desgraciadamente aquellos usos y costumbres se han quedado anticuados, seguramente por falta de caballeros. Y los del montepío, ni contamos. Caja España, por ejemplo, está en pleno proceso electoral para designar presidente en dura competencia entre empresarios de construcción, partidos políticos, ayuntamientos, Junta, sindicatos y algunos espontáneos de última hora que pagaban a cien euros el voto. Viene en los periódicos del fin de semana, así que lo sabe todo el mundo menos el fiscal, el subdelegado del Gobierno y el presidente de la Audiencia. El sargento de la Guardia Civil sí está enterado, dado que recibe gratis el periódico por las multas que nos permuta a cambio y a diario, pero se hace el loco, como con nosotros, a la espera de recibir órdenes superiores. «Panda de iletrados», le dijo el otro día al repartidor de esta casa. Esto es un escándalo. Caja España maneja -decir que administra es mucho suponer- más de un billón, con «b» de burros de las viejas pesetinas de los pobrines ahorradores leoneses, se dice pronto, aunque algunos no tanto, y unos pocos quieren repartirse el pastel. El tal Conde, según los papeles, pagaba a cien euros el voto. Es una vergüenza, pero, si no ganó, fue, encima, por lo barato. El constructor Santos Llamas pagaba a los suyos con billetes de avión de Lagun Air, comidas y electrodomésticos. El leonesista Rodríguez de Francisco, tercero en discordia y que no se sabe de dónde saca para tanto como destaca, asegura haber perdido muchos votos porque las lavadoras de Santos eran de gama más alta. Esto es poner a la zorra a cuidar las gallinas.

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