Blair, pragmático

TONY Blair presentó el martes a la Cámara de los Comunes un documento sobre prioridades energéticas en el que se deja constancia de que si no se sustituyen las actuales plantas nucleares británicas por otras nuevas cuando aquéllas queden obsoletas dentro de quince años, el país no dispondrá de la energía necesaria para satisfacer la demanda. En efecto, las centrales nucleares aportan actualmente el 20% de la oferta, porcentaje que se reduciría al 6% dentro de tres lustros. El viraje de Blair, que podría concretarse en un próximo Libro Blanco, ha sido brusco, ya que hace apenas dos años el laborismo ratificó la moratoria nuclear; ello hace temer una reacción airada de las organizaciones ecologistas pero constituye una prueba de realismo político que deberán imitar otros países