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DESDE LA CORTE

El Estado, Fadesa y la resignación

Publicado por
FERNANDO ONEGA
León

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LUIS VENTOSO anotaba ayer con su agudeza habitual que Martinsa le paga a Manuel Jove (Fadesa) más de lo que el gobierno invertirá en Galicia en todo un año. Es la escandalosa ostentación del nuevo capitalismo. Se había visto antes con otra cifras del Presupuesto: mientras algunos trataban de montar un escándalo con los 700 millones de más que se lleva Cataluña como fruto del Estatut, un solo empresario, José Manuel Entrecanales, reunía cinco veces esa cantidad (3.500 millones) para comprar el diez por ciento de Endesa. Y todavía podemos añadir una anotación: mientras el gobierno hacía filigranas inútiles para impedir que E.On comprase la eléctrica española, el único que puso en dificultades a los alemanes ha sido el mismo empresario. Así es la vida, qué le vamos a hacer. Y así es el mercado. El Estado recauda muchísimo dinero. Pero, entre lo que gasta en su propio boato y mantenimiento y las cantidades que tiene comprometidas, resulta que sólo dispone de diecinueve euros de cada cien que entran en sus arcas. Y, si a esos diecinueve euros se restan los compromisos políticos nuevos que va adquiriendo para mantenerse en el poder, se queda en lo que vemos: en uno de esos miembros de la nobleza que mantienen castillos, palacios y mayordomos envejecidos, pero no pueden cambiar las lámparas del salón. ¿De dónde podría sacar Solbes 3.500 millones, aunque fuera para construir hospitales? De ninguna parte. Los hospitales -y las cárceles- acabarán siendo de alguna inmobiliaria. «El Gobierno tiene el Boletín Oficial del Estado, a nosotros sólo nos queda la resignación», decía Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de Banca. Ahora, el ministro y los consejeros autonómicos de Economía pueden decir: «Ellos (los inversores privados) tienen el dinero, a nosotros sólo nos queda el Boletín Oficial». Y hasta ese papel debe imponer poco porque, cuando se trata, por ejemplo, de frenar la invasión del cemento en el litoral, el gobierno no lo sabe utilizar, sino que se dedica a comprar terrenos. Las leyes ya no sirven, señores; sólo sirve la propiedad. Con lo cual, resultan muy emocionantes las actitudes del Gobierno gallego ante la compra de Fadesa, que deja a Galicia sin otra de las mejores piezas de su tejido empresarial. La parte nacionalista del gabinete (encabezada por Anxo Quintana) piensa y dice que esto se resuelve con más nacionalismo. Y la parte socialista (Emilio Pérez Touriño) se reunirá con los empresarios comprado y comprador para que éste último haga el favor de dejar la sede social en La Coruña y amortiguar el efecto económico de la opa. Si Martinsa dice que sí, el gobierno le debe una que, naturalmente, será cobrada. ¿Y si dice que no? Pues toca resignarse. Por no decir otra palabra.