Pocas noticias de Fidel

AL CUMPLIRSE los cuarenta días del anuncio de la enfermedad de Fidel Castro y ante el flujo de rumores de todo tipo desatado por su prolongada ausencia de la pantalla, la televisión cubana ofreció unas imágenes del líder, muy desmejorado físicamente. Si el eclipse de Fidel es en realidad una estratagema para que los cubanos se vayan haciendo a la idea de la desaparición del dictador, hay que reconocer que el efecto ha sido positivo: no sólo se está facilitando en el interior una reacción templada sino que en el exterior se está encarando la sucesión con un realismo que no parecía posible. En cualquier caso, es deseable que sean los propios cubanos del interior quienes tomen las grandes decisiones en este momento crítico que se parece avecinarse.