Diario de León
Publicado por
ISABEL CARRASCO LORENZO
León

Creado:

Actualizado:

SE CUMPLEN MIL días desde que José Luis Rodríguez Zapatero ganó las elecciones. Aún recordamos como aseguró alto y claro: «Haré honor a la palabra dada». Pero en su tierra, en León, vemos como el papel lo aguanta todo, pero después de estos mil días no podemos disfrutar de nada. Los leoneses están decepcionados con el Gobierno central y eso lo digo alto y claro, porque nos lo trasmiten los ciudadanos, ciudadanos que votaron a Zapatero porque era de León y esperaban un gesto que demostrara su compromiso y que hoy, arrepentidos claman realidades. En la actualidad, hay un cúmulo de promesas sin materializar; algunas se han perdido en el olvido, duermen el sueño de los justos, otras sin embargo, sirven de balón de oxigeno al PSOE leonés que trata sin sonrojarse de justificar lo injustificable, pero después de mil días, el aire se acaba, se esfuma y se convierte en humo. Muchas visitas, sí, muchas horas en los medios, pero es que Zapatero viene en helicóptero y no ve como la autovía León-Valladolid, prevista y prometida para el 2009, se retrasa hasta el 2011, de una forma injustificada, obligando a leoneses y vallisoletanos a jugarse la vida en una de las carreteras con mayor siniestralidad. Tampoco ha cumplido esas otras autovías, como la Ponferrada-Orense o la Ponferrada-La Espina. El helicóptero no paga los peajes del Huerna y de la León-Astorga, promesas que sirvieron para captar un puñado de votos, para crear multitud de expectativas. En los mítines se llenaba la boca de los líderes socialistas para tener que recular después y argumentar falta de previsión, pero mientras siguen asegurando que se cumplen las promesas y que el famoso Plan Oeste está cumplido al 90%. No me canso de decir que estas autovías y peajes están incluidas en esa vorágine de 115 medidas, pero sigo sin saber porque no se sonrojan. Pero no lo hacen, no se sonrojan e incluso cuando el PSOE leonés vota en contra de las enmiendas encaminadas hacer cumplir sus promesas pero después no se les pone la cara colorada cuando votan a favor, votan alto y claro, a favor de la supresión de peajes en Cataluña. ¿Ustedes lo entienden? Yo tampoco. El helicóptero del presidente del Gobierno sobrevuela las vías del tren y desde las alturas, se puede ver como el AVE no llegará a León en el 2008, ni a Ponferrada en el 2011. Como es imposible que llegue cuando no hay voluntad política, ni tampoco voluntad inversora. Que no nos sirve que llegue un tren AVE que tarda lo mismo que un talgo, que cuando se cumple se cumple en condiciones o si no es necesario rectificar con humildad y aceptar que fue precipitado, cuanto menos, marcar esos plazos. Han pasado mil días y veo como Zapatero ha olvidado sus promesas iniciales, mil puestos de trabajo para el Inteco, 8.500 para el Ciemat, 80.000 gracias al Plan Oeste, yo no les veo, no les palpo. Hemos visto como hasta algún socialista cabreado echó un órdago a la grande a su partido y dejo claro que el compromiso del Gobierno central era deficiente y hasta ellos se daban cuenta, pero una foto de apoyo en la presentación de la candidatura no ha sido suficiente para justificar la falta de inversión. A estas alturas, todo lo que ha podido inaugurar Zapatero son los proyectos iniciados por el Partido Popular. Recuerdo ahora la Variante de Pajares, la ampliación del aeropuerto, la continuación de la ronda sur, pero no se sonrojan. Después de mil días, ni los astorganos tienen su Lyda, ni en Sahagún la restauración de la Peregrina, ni en Laciana el parador, ni los jóvenes leoneses viviendas sociales, ni la capital un palacio de congresos, ni un soterramiento del cruce de Michaisa... esto es el Gobierno de Zapatero, un cúmulo de ideas, de improvisaciones que han llenado cientos de páginas y nosotros queremos realidades después de mil días. Con franqueza diré que en unos días en el Senado debatiremos las enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado y espero que apoyen nuestras propuestas encaminadas a cumplir sus compromisos. No es bondad es justicia. Pido que rompan la disciplina de partido si es preciso y que piensen que el único objetivo es cumplir con aquellos ciudadanos que hace mil días le apoyaron y con aquellos que no le apoyaron pero merecen el respeto del Gobierno.

tracking