La Juani existe

LA PELÍCULA de Bigas Luna, Yo soy la Juani , nosha descubierto o recordado a muchos de nosotros que la Juani, hija de inmigrantes de origen andaluz, extremeño o gallego, llegados en lentos pero reiterados trenes a la Cataluñade los años 50, existe. Y a pesar del tiempo transcurrido las Juanis españolas, hijas de esos inmigrantes,  no se han diluido en la catalanidad, ni en el madrileñismo acomodado, y viven en los barrios periféricos  de las grandes ciudades: son las habitantes de Alcorcón, Hospitalet, Tarrassa, de Getafe o de Leganes; son las dependientas de comercio, cajeras de supermercado, peluqueras o pescaderas, que en cualquier caso no llegan a mileuristas, y en escasa medida madres amas de casa o universitarias. Son las protagonistas de la película de Bigas Luna. La Juani es el icono de un universo joven que centra sus aspiraciones en ponerse guapa, en los móviles, en la discoteca y en mantener relaciones sexuales con su pibe, (follar es lo que mas me gusta, dice la protagonista), o en ellos tunear el coche y fardar de piba. Es el universo de generaciones sin aspiraciones colectivas  e individualmente desinhibidas, que sueñan con el triunfo, pero aceptan la sociedad como es, automarginadas que pasan de la política y nutren las ingentes bolsas de absentismo que tanto hacen penar a los políticos el día de las elecciones. Porque la Juani y su pibe no votan. En el barrio de Bonavista de la ciudad de Tarragona, que es donde se rodó la película, donde se  hace vivir en la ficción  a la protagonista, en las elecciones a la Generalitatcatalana del pasado uno de noviembre, votó el 38% de los habitantes de barrio. Si a pesar de todo la Juanise encontrase entre ellos, habría votado socialismo en un 55% y no seria nacionalista ( CIU 12%, ERC 2%). No sé muy bien lo que será de las Juanis con el paso del tiempo, aunque no parece que el progreso económico y social del país les toque muy directamente, ni a ella ni a su pibe el jonah, mecánico de profesión volcado en el tuning.    Sobre todo ello se ha celebrado en Cataluña un interesante evento organizado por el Centro de Estudios Jordi Pujol, en el que el expresidente y el cineasta Bigas Luna, debatieron en presencia de periodistas sobre los jovenes y los aspectos sociales de la película. Al final el muy honorable  regaló un jamón al cineasta, rompiendo la costumbre de hacerlo con una corbata como era lo habitual con invitados mas civilizados. Al debate faltaron, pues no estaban invitados la Juaniy el Jonah,, ocupados tal vez en sacar lustre al tuneado o en divertirse a su aire en la fiebre del sábado noche.