EN BLANCO
La corrupción llega al deporte
LA RED DE LA CORRUPCIÓN va tejiendo una densa maraña que va cubriendo los campos más significativos de la sociedad española. También los de fútbol. Una vez son los políticos y los partidos: otras los mismos garantes del estado de derecho, los jueces y los letrados, los promotores inmobiliarios colocados a la cabeza, y a veces los mismos empresarios; no faltando los intelectuales convertidos en portavoces oficiales; y hasta las mismas universidades, que debían estar al servicio de la verdad, del conocimiento y de la critica social, acaban en sumisas prolongaciones del poder establecido. Es como si una telaraña lo abarcara todo. Un día son las recalificaciones de terrenos, otro, los impagos a la Seguridad Social, otra vez, las deudas a Hacienda y no en pequeñas cantidades, porque el fraude menudo queda para los ciudadanos y los empresarios honrados; en el deporte todo es a lo grande, como grandes son las contabilidades trucadas con activos ficticios e inciertos que contabilizan el valor estimado de esos jugadores que todos admiramos o no; y las comisiones, y los sueldos monumentales que deberían escandalizar. Y así van acumulando déficits inmensos que todos terminamos pagando . Y esa corrupción llega a las federaciones, grandes o pequeñas, como cotos de caza sin guarda. Y también con dinero de todos. Recuerdo aquella cita de Anacarsis, un príncipe filósofo escita, bárbaro entre los griegos , que decía así: «La ley es una telaraña que atrapa las moscas y deja escapar los pájaros». Certera sentencia , porque somos precisamente las moscas y los moscones los que no podemos, ni sabemos, ni queremos, escapar de la ley, pero aunque quisiéramos tampoco lo lograríamos. Inmediatamente seríamos cazados. Pero los pájaros, esos pájaros a los que antes me refería, esos sí que escapan de la ley, porque la ley no esta hecha para ellos., y si hiciera falta se abriría para que pasaran con más facilidad, porque entre pájaros anda el juego. Y al final esos mismos pájaros terminarán por comerse a las moscas, y también a los moscones, aunque molesten un poco más al tragarlos. 1397124194