Miedo y sometimiento, no

El talante deRodríguez Zapatero se está golpeando las exhibiciones religiosas: primero los crucifijos, luego los villancicos y ahora la celebración de la Navidad. La resolución de anular el festejo navideño en el instituto público Hilarión Gimeno de Zaragoza no ha sido del embeleso de los progenitores. El obispo y los padres católicos, coincidieron en que se está confundiendo laicismo con aconfesionalidad. Así, el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, valoró la medida de «forzada y hasta ridícula». También la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y Padres de Alumnos (Concapa), lamentó que «la intolerancia del laicismo promovido por el Gobierno» torne a «atacar la libertad de conciencia, religión y expresión» y alentó a la recogida de refrendos de los papás del colegio para rescatar la fiesta navideña. Por otro lado, la presidenta de los padres del instituto, Cristina Añaños, expuso que «desde infantil las padres eligen para sus niños clases de religión católica, evangélica, musulmana o alternativa a la Religión». También, en Oviedo, el colegio público Veneranda Manzano, ha resuelto liquidar los belenes, los villancicos y con todas los adornos que proclaman la Navidad. Manifiestan, la directiva y el personal docente, que pactaron no solemnizar el enraizado festival navideño. Según afirma la presidenta de la Asociación de Padres y Madres de Alumnos (AMPA), Ana Silva, «en la programación general del centro no está incluida la fiesta de la Navidad, sino otro tipo de festejos, como el día del otoño, el día de la paz y el día del libro». La portavoz de ampa aseveró que: «Todos los padres deseamos que vuelva a celebrarse el festival navideño, y este año desde la asociación, prepararemos el festival, en horario de tarde, con nuestros propios medios». «En Belén nace Jesús. No hay lugar en la posada. En un establo. Y su Madre, la Virgen, le envuelve en pañales y le recuesta en el pesebre» Se lee en el evangelio de San Lucas. Clemente Ferrer Roselló (Lugar). «Educación para la Ciudadanía adoctrina a los pequeños en el engaño de hacernos creer que hay varios tipos de familia, la barbaridad de enseñar que el aborto es un derecho, y el disparate de que la tendencia sexual se elige». Una materia, que recordemos, según muestran los documentos aprobados por el Gobierno, va en contra de la moral cristiana y adoctrina a los más pequeños con antivalores. pesar del rechazo generalizado que ha producido en la sociedad, inexplicablemente, la ministra sigue defendiendo que «Educación para la Ciudadanía» respeta la Constitución y los acuerdos con la Santa Sede». Hasta se ha atrevido a decir que la «propuesta del Ministerio es absolutamente respetuosa con el derecho y la libertad de los padres, tanto los que quieren que sus hijos estudien Religión como el derecho de los que no quieren que sus hijos estudien Religión». Ante esta aseveración, cabe preguntarse: ¿Está segura la ministra que respeta los derechos de todos?, entonces, ¿Por qué impone esta asignatura? Pienso que la simple imposición es ya inculcarlos, por tanto no los es absolutamente. Jaume Catalán Díaz (Gerona). Lorenzo Mistal (En el debate de diariodeleon.es).